MADRID, 4 Jul. (EUROPA PRESS) -
La organización Human Rights Watch (HRW) ha denunciado este jueves las condiciones "degradantes" de tres prisiones en la provincia iraquí de Nínive, en la que asegura que hay miles de prisioneros, la mayoría encarcelados por cargos de terrorismo.
"El Gobierno iraquí necesita urgentemente reconstruir y rehabilitar sus instalaciones de detención", ha indicado la subdirectora de HRW para Oriente Próximo, Lama Fakih. "Irak tiene el deber de garantizar que los detenidos estén en condiciones decentes, de acuerdo con las normas internacionales", ha añadido.
Según la organización, Tal Kayf, Faisaliya y Tasfirat, los tres centros de detención preventiva en la provincia, cuentan con una capacidad máxima de 2.500 personas. Sin embargo, a finales de junio de este año había alrededor de 4.500 detenidos, de los cuales 1.300 fueron juzgados y condenados y deberían haber sido trasladados a cárceles de Bagdad.
HRW informó previamente de la muerte de prisioneros bajo custodia en Nínive debido al grave hacinamiento. La organización ha afirmado que mantener a los detenidos en esas condiciones equivale a malos tratos.
La organización ha instado a los Ministerios del Interior y de Justicia a mejorar las condiciones y acelerar el proceso de investigación para garantizar a todos los detenidos un juicio o que sean excarcelados de forma rápida y justa.
"Las preocupaciones en torno al hacinamiento no solo afectan a los detenidos, sino a la comunidad en general", ha recalcado Fakih. "Las autoridades deben garantizar que las condiciones en las cárceles de Irak no fomenten más quejas en el futuro", ha añadido.
