YAKARTA, 5 Sep. (EP/AP) -
El anuncio de que un hijo del ex dictador Suharto saldrá en libertad condicional, apenas cuatro años después de haber sido sentenciado por la muerte de un juez, ha despertado un vivo debate sobre el sistema judicial en Indonesia.
Tommy Suharto, multimillonario como sus hermanos, fue condenado en 2002 a 15 años de cárcel, pero este mes saldrá en libertad bajo palabra. La noticia ha hecho que muchos se cuestionen si Indonesia ha cambiado en algo desde que su padre gobernara durante 32 años hasta caer en 1998, dejando una legado de corrupción y brutalidad.
Marzuki Darusman, quien ejercía como fiscal general cuando Hutomo Mandala Putra --el verdadero nombre de Tommy Suharto-- fue sentenciado, comentó hoy que su salida de la cárcel podría levantar sospechas entre la población.
A Tommy Suharto, de 43 años, se le encontró culpable en julio de 2002 de contratar a dos hombres para asesinar a un juez del Tribunal Supremo, Syafiuddin Kartasasmita, quien previamente lo había condenado por corrupción.
Posteriormente, la sentencia de 15 años por la muerte del juez fue reducida a 10. Después, el reo se benefició del sistema de buena conducta de la justicia nacional, que concede reducciones de pena de entre seis meses y un año, así como la posibilidad de salir bajo palabra después de cumplir dos tercios de la pena.
El Ministerio de justicia confirmó que este mes saldrá de la cárcel de máxima seguridad de Cipinang, sin precisar el día exacto. Su padre evitó la cárcel por cargos de corrupción en 2000, después de que los tribunales establecieran que una serie de derrames cerebrales le habían dejado demasiado enfermo para ir a juicio.
"No ha habido cambio. Y si lo ha habido, en estos días (la corrupción) es incluso peor", opinó el activista Muhammad Asrun. "La única diferencia es que hoy la gente es libre de hablar a la prensa", apostilló.
