Irak.- Bush manifiesta su voluntad de cambio en la estrategia desarrollada en Irak

Actualizado: sábado, 2 diciembre 2006 17:56

NUEVA YORK, 2 Dic. (del corresponsal de EUROPA PRESS Carlos López) -

El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, expresó hoy durante su discurso radial semanal su voluntad de llevar a cabo los cambios necesarios en la estrategia que su Administración desarrolla en Irak con el objetivo de cumplir los compromisos contraídos con Irak y lograr un Gobierno de unidad.

Bush, que ha regresado de un viaje por Jordania donde se entrevistó con el primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, explicó que trató con él las fórmulas para mejorar "la situación sobre el terreno en el país y forjar una democracia duradera".

El presidente estadounidense se mostró "impresionado" con el deseo "de tomar las decisiones difíciles" de Al Maliki, y expresó al primer ministro iraquí la voluntad de Estados Unidos de llevar a cabo cambios que sirvan para apoyar de mejor manera al Gobierno de unidad de Irak, a través del fortalecimiento del ejecutivo mediante un robustecimiento de sus fuerzas de seguridad y el apoyo a instituciones nacionales estables y perdurables.

"La voluntad de Estados Unidos en Irak es fortalecer su Gobierno democrático y ayudar a los líderes de Irak a desarrollar un país libre que puede gobernarse, sostenerse y defenderse, y que es un aliado en la guerra contra el terrorismo", explicó Bush, quien añadió que este factor "depende del éxito de las fuerzas de seguridad".

Para el presidente estadounidense, a pesar de que "la capacitación de las fuerzas de seguridad de Irak ha sido constante", es necesario "hacer más y más rápido", por lo que se necesita "una fuerza iraquí más numerosa y capaz" en un breve periodo de tiempo que permitirá "proporcionar seguridad y estabilidad, particularmente en Bagdad".

Bush expresó la necesidad de lograr instituciones sólidas que resistan el paso del tiempo y las dificultades para lo cual es necesario el imperio de la ley y el respeto de los derechos de las minorías, estando Al Maliki de acuerdo en que "fraccionar el país no es lo que el pueblo de Irak desea, y que cualquier división de Irak resultaría en mayor violencia sectaria", y a largo plazo "la seguridad en Irak depende de la reconciliación entre las diversas comunidades étnicas y religiosas".

Bush también trató con el primer ministro "sobre el análisis, a punto de presentarse, de la estrategia de Estados Unidos en Irak", reconociendo que la violencia reciente en este país "ha sido inquietante" y ha generado incógnitas en el pueblo estadounidense "sobre el camino a seguir", insistiendo en que "la labor por delante no será fácil".

"Al ayudar al primer ministro Al Maliki a fortalecer las instituciones democráticas de Irak y promover la reconciliación nacional", explicó Bush, y tomar las decisiones correctas habrá "repercusiones por todo Oriente Próximo", siendo el fracaso en Irak una acicate para los extremistas que contarían con más poder para socavar las jóvenes democracias en toda la región.

"El éxito en Irak requerirá que los líderes en Washington --tanto republicanos como demócratas-- cooperen y lleguen a mayor consenso sobre el mejor camino a seguir", destacó el presidente norteamericano, quien aseguró que trabajará "con los líderes de ambos partidos para lograr este objetivo" que permitirá "ayudar a los iraquíes a construir una nación libre y democrática en el corazón de Oriente Próximo" y "fortalecer a los moderados y reformistas en toda la región que se esfuerzan por lograr la paz".