WASHINGTON, 19 Mar. (EP/AP) -
El máximo comandante de las tropas estadounidenses en Irak, George W. Casey, afirmó hoy que los soldados norteamericanos tendrán que permanecer en este país durante los próximos años, aunque el número de sus militares descenderá mientras las fuerzas iraquíes ganan fuerza.
"Veo un par de años más de esto, con una gradual reducción de la presencia aquí en Irak, mientras las fuerzas de seguridad iraquíes avanzan", declaró el general Casey. Un día antes de que tenga lugar el tercer aniversario de la invasión de Estados Unidos a Irak, Casey reconoció que en el momento del inicio de la guerra no pensó que la insurgencia sería tan fuerte como lo está siendo.
En una intervención en un programa de la NBC, el comandante supremo de las fuerzas estadounidenses en Irak aseguró que no cree que el país esté en peligro de caer en una guerra civil, aunque piensa que existe una posibilidad, dado el aumento de las tensiones sectarias y la violencia. "La situación aquí es frágil. Sospecho que continuará frágil hasta que tengamos un nuevo Gobierno, un Gobierno de unidad nacional", explicó. Refiriéndose al entrenamiento de las fuerzas de seguridad iraquíes y a las elecciones celebradas el pasado año, Casey dijo que se han hecho buenos progresos políticos y militares. "La naturaleza a largo plaza de nuestra presencia aquí debe ser sujeto de discusión con el nuevo Gobierno de Irak", señaló.
