LONDRES, 14 Abr. (EUROPA PRESS) -
Un alto oficial de la infantería de marina estadounidense se ha mostrado dispuesto a disculparse por los daños causados por sus tropas a la ciudad antigua iraquí de Babilonia.
Pocos meses después de la invasión de Irak en 2003, efectivos norteamericanos construyeron sobre las ruinas una plataforma para el aterrizaje de helicópteros y llenaron con restos arqueológicos los sacos de arena que se usan en las barricadas.
John Coleman era el oficial de mayor rango en la zona cuando ocurrieron los hechos y, aunque justificó las acciones, declaró a la BBC que está dispuesto a disculparse con los iraquíes de ser necesario.
Los Jardines Colgantes de Babilonia eran considerados una de las siete maravillas del mundo. Las 2.000 tropas que fueron desplegadas en la zona causaron grandes daños a las antiguas ruinas. Por ejemplo, las constantes vibraciones de los aterrizajes de helicópteros provocaron el colapso del techo de una de las estructuras.
Los soldados decidieron además llenar los sacos de arena de las barricadas con los restos arqueológicos, ya que estaban por todas partes y eran fáciles de recoger.
El director del Instituto Iraquí de Herencia y Antigüedades, Donny George, denunció que llevará décadas reparar los daños. No obstante, Coleman argumentó que si su contingente militar no hubiese tomado el lugar las antiguas ruinas hubiesen estado vulnerables a los saqueadores.
