Irak.- Los partidos de la Alianza Unida aceptan el nombramiento de Jawad al-Maliki para el cargo de primer ministro

Actualizado: viernes, 21 abril 2006 20:57

BAGDAD, 21 Abr. (EP/AP) -

La Alianza Unida Iraquí ha aceptado el nombramiento de Jawad al-Maliki para el cargo de primer ministro en lugar del actual titular del cargo, Ibrahim al-Jaafari, cuya designación era rechazada por árabes suníes y kurdos, lo que había empantanado el desarrollo de la vida política iraquí, según informaron dos dirigentes de esta coalición, la principal formación chií de Irak, ganadora en las últimas elecciones.

Los dirigentes de los siete partidos que forman la Alianza llegaron a un acuerdo para el nombramiento de Al-Maliki en una reunión celebrada hoy, según informó Jalal Eddin al-Sagheer, miembro del Consejo Supremo para la Revolución Islámica en Irak (CSRII), principal partido de la coalición.

Al-Maliki fue elegido por seis de los siete partidos, según otro dirigente del CSRII, Ridha Jawad Taqi. El séptimo partido, Fadhila, había presentado su propio candidato, pero bastaba con el apoyo de cinco de los siete grupos integrantes para alcanzar el acuerdo de "consenso" requerido. El designado se someterá a la elección defintiva para el cargo en la sesión del Parlamento convocada para mañana.

Si los partidos árabes suníes y kurdos aceptan a Al-Maliki --y en principio parece que será así-- se pondrá fin a dos meses de punto muerto en la vida política que impidieron la formación de un nuevo Ejecutivo.

Al-Maliki es uno de los principales dirigentes del partido de Al-Jaafari, el Dawa, e incluso ha ejercido en numerosas ocasiones de portavoz del todavía primer ministro. No obstante, se sabe poco sobre él, salvo que huyó del país en los años ochenta en dirección a Siria, donde lideró la delegación de Dawa en el exilio, y que regresó a Irak en 2003, tras el derrocamiento de Sadam Husein.

Asimismo, Al-Maliki participó en la comisión encargada de purgar a los miembros del antiguo partido único en tiempos de Sadam Husein, el Baath. Quizá por esta labor, el CSRRII y otros partidos de la Alianza se oponían en principio a su elección, por considerar que podía resultar inaceptable para los árabes suníes (que constituían la base del Baath).

No obstante, el Dawa había advertido de que el rechazo a Al-Maliki podría generar problemas en la propia Alianza, después de que se desestimara el nombramiento de Al-Jaafari, líder de la misma formación que el recién designado.