BAGDAD, 12 Mar. (EP/AP) -
Los siete ex colaboradores de Sadam Husein que están siendo juzgados junto al ex dictador por su presunta implicación en la masacre de Dujail, en la que murieron 148 chiíes, prestaron hoy testimonio por primera vez, negando toda participación en las detenciones y asesinatos de chiíes en la década de 1980.
Dos de los acusados, Mizhar Abula Ruwayid y Ali Daih Ali, ex funcionarios del partido Baath, que gobernó en la época de Sadam, fueron directamente interrogados por el presidente del tribunal y por fiscales acerca de la represión en la población chií de Dujail en 1982, tras un intento de asesinato del ex presidente.
Sadam y siete miembros de su derrocado régimen --entonces apoyado por Estados Unidos-- están siendo procesados por los asesinatos de 148 chiíes durante la represión, así como por la detención ilegal y tortura de residentes de la misma localidad. Los ocho se enfrentan a pena de horca si son declarados culpables.
Estos testimonios representan una nueva fase en el proceso. Desde que comenzaron las audiencias, el 19 de octubre, la fiscalía ha presentado testigos y documentos que, dice, demuestran el papel de los acusados en la represión.
Los acusados han hablado con frecuencia durante sesiones previas, defendiéndose de las acusaciones. Pero la sesión de hoy fue la primera en la que han prestado testimonio directo.
La sesión del hoy, finalmente aplazada hasta mañana, fue la primera desde el 1 de marzo, cuando Sadam admitió ante el tribunal que él fue el responsable de enviar ante un tribunal a los 148 chiíes, pero insistió en que sus acciones no constituyeron un crimen, pues se presumía que esos sospechosos habían intentado asesinarlo.
Si bien hay casos más famosos contra de Sadam y el resto de acusados --entre ellos un ataque con gas venenoso contra la población de Halabja, en 1988, que mató a 5.000 kurdos, o la represión de 1991 contra chiíes y kurdos-- la Fiscalía ha elegido el incidente de Dujail pues dice que es el que cuenta con más testimonios y documentos incriminatorios.
