MADRID, 28 Ene. (EUROPA PRESS) -
La organización humanitaria Amnistía Internacional (AI) ha advertido de que al menos diez personas --ocho mujeres y dos hombres-- condenadas por adulterio están pendientes de ser ejecutadas mediante lapidación en Irán, una práctica "específicamente concebida para aumentar el sufrimiento de la víctima".
"La ejecución por lapidación es un castigo especialmente cruel que Irán aplica a hombres y mujeres casados acusados de cometer adulterio, desoyendo así a la Comisión de Derechos Humanos de la ONU, según la cual tratar el adulterio como delito es contrario a las normas internacionales", afirmó la sección española de la organización en una acción difundida por su página de Internet http://www.es.amnesty.org/).
"La lapidación está específicamente concebida para aumentar el sufrimiento de la víctima, pues para llevarla a cabo se escogen piedras lo suficientemente grandes como para causar dolor pero no tanto como para matar a la víctima enseguida", prosiguió AI.
Según la información de la que dispone Amnistía Internacional, en Irán "hay al menos ocho mujeres y dos hombres expuestos a ser lapidados". "Las mujeres son Kobra N., Iran A., Khayrieh V., Ashraf Kalhori, Gilan Mohammadi, Afsaneh R., M.J. y H. Los hombres son Abdollah Farivar y Gholamali Eskandari", informó la organización.
Según AI, en el camino hacia la abolición total de la pena de muerte, "las autoridades iraníes deben promulgar una ley que prohíba inequívocamente la lapidación como pena judicial". A la espera de esta ley, "deben declarar de inmediato una suspensión de las lapidaciones, dejando claro a todos los jueces y otros funcionarios que tendrán que rendir cuentas en caso de incumplir tal suspensión", manifestó. "Además, deben destipificar como delito las relaciones sexuales consentidas entre adultos", agregó.
Estas lapidaciones se unirían a las perpetradas el pasado 26 de diciembre, cuyas víctimas fueron Houshang Khodadadeh y otro hombre no identificado. "Después de un año en el que se registraron noticias alentadoras y en el que la acción de miles de activistas en todo el mundo consiguió parar la lapidación de al menos cuatro personas, 2008 acabó con esta terrible noticia", denunció AI.
Según la organización, los dos nuevos casos de lapidación demuestran "una vez más" que las declaraciones de la Magistratura iraní, que en 2002 y en agosto de 2008 anunció sendas suspensiones de las lapidaciones, no son suficientes. Desde 2002 han sido lapidadas cinco personas. "Por ello, es necesario redoblar los esfuerzos para terminar de una vez por todas con esta práctica atroz", aseveró Amnistía.
