TEHERÁN, 15 Ago. (EP/AP) -
La Policía iraní ha detenido a dos nacionales chinos que, según sospechan las autoridades, estaban espiando sus instalaciones militares y nucleares, según informó hoy el portavoz de Justicia, Ali Reza Jamshidi.
"Los ciudadanos chinos fueron detenidos mientras tomaban una fotografía y grababan un vídeo de un complejo militar en la ciudad de Arak", explicó a los periodistas. En Arak, 400 kilómetros al suroeste de Teherán, el Ejecutivo iraní ha construido un reactor de agua pesada para alimentar con éste material --empleado como refrigerante en los procesos de fisión del uranio-- a la central nuclear de Isfahán.
"Entraron en Irán a través de las islas Kish como turistas", precisó e incidió en que las autoridades judiciales está investigando el caso en relación, insistió, a un presunto delito de espionaje.
El Ministerio de Inteligencia iraní suele anunciar golpes contra las redes de espionaje extranjeras en el país, especialmente estadounidenses o británicas.
Beijing goza de buenas relaciones con el régimen de los ayatolás y ha sido uno de los miembros del Consejo de Seguridad permanentes, junto a Rusia, que más se han opuesto al refuerzo de sanciones contra Irán por su negativa a renunciar a su programa de enriquecimiento de uranio, tal y como exige la comunidad internacional.
