MADRID, 22 Ago. (EUROPA PRESS) -
El comité estadounidense para la protección de la oposición iraní de los Muyahidines del Pueblo de Irán (PMOI, por sus siglas en inglés) advirtió ayer de un inminente ataque de las fuerzas iraquíes, a petición de las autoridades de Teherán, contra el campo de refugiados de Ashraf, en la provincia iraquí de Diyala (a 80 kilómetros de Bagdad) y ha pedido la intervención "inmediata" de las fuerzas estadounidenses para "impedir un baño de sangre".
La práctica totalidad de los más de 3.500 refugiados iraníes que se alojan en Ashraf pertenecen al PMOI, un grupo inicialmente adscrito a la Revolución Islámica que triunfó en 1979, y posteriormente levantado en armas durante los años 80 contra el régimen clerical iraní, con apoyo del entonces dictador iraquí Sadam Husein, una campaña que terminó a principios de la década de los 90.
El Comité estadounidense para los Residentes del Campamento Ashraf denuncia a través de un comunicado recogido por Europa Press que la incursión de las tropas iraquíes, de la que afirma tener constancia a través de "fuentes internas del régimen iraní", tendría lugar a petición expresa del Gobierno de Teherán, que el pasado 4 de agosto de 2009 solicitó a Bagdad la extradición de los 55 dirigentes del PMOI, según informó el comité citando una información de la agencia de noticias Reuters.
"El líder supremo de Irán, Alí Jamenei, está empeñado en provocar al primer ministro iraquí, Nuri Al Maliki, a que desencadene otro sangriento asalto contra Ashraf", advirtió el comunicado.
El campamento funcionaba previamente bajo el control de las fuerzas estadounidenses, que terminaron cediendo estas competencias a Irak tras la firma del Convenio sobre el Estado de Fuerzas que entró en vigor a principios de año, y que sin embargo no recoge, según Amnistía Internacional, ningún artículo que se refiera específicamente a la entrega del control del campamento por parte de EEUU, cuyos residentes gozan del estatus de "personas protegidas".
De llevarse a cabo esta nueva incursión, se trataría del segundo ataque perpetrado contra los residentes del campamento en menos de un mes, tras el llevado a cabo el pasado 28 de julio y que dejó ocho muertos y centenares de heridos. Para evitar que se repita este suceso, el comité "exige que las fuerzas estadounidenses en la zona sean puestas rápidamente en alerta y listas para intervenir en la zona lo más pronto posible si se advierte amenaza de violencia" porque "es la única forma de impedir otro baño de sangre".
El PMOI está reconocido como organización terrorista por Estados Unidos, Canadá, Irán e Irak, pero ha sido recientemente eliminado de la lista que maneja la Unión Europea ya que el grupo "no propugna la oposición armada al Gobierno iraní ni participa en ella", según Amnistía.
