Los iraquíes parecen más preocupados por la corrupción que por la violencia

Actualizado: miércoles, 24 junio 2009 13:54

BAGDAD, 24 Jun. (Reuters/EP) -

Un gran número de iraquíes, heridos por la violencia después de años de luchas entre chiíes y suníes, parece más preocupados por la corrupción que ha inundado casi todos los aspectos de su vida así como las nacientes instituciones públicas del país.

La violencia provocada por la invasión estadounidense de 2003 está disminuyendo y, de esta forma, los iraquíes se centran cada vez más en los problemas a los que se enfrentan en su vida diaria, como la electricidad intermitente, la falta de agua potable y el pobre sistema de alcantarillado.

En la cima de las preocupaciones de muchos está la corrupción endémica, que daña los esfuerzos por reconstruir y dar servicios básicos y, en última instancia, podría alimentar el descontento en el que la insurgencia puede encontrar un terreno preparado para renovarse.

"No puedo dar un paso sin sobornar a la gente", aseguró el director de relaciones públicas en una compañía de construcción extranjera, Adel Hamza, que se encarga de conseguir que los contratos sean firmados, sellados y autentificados por las autoridades iraquíes. "Todo el mundo tiene su boca abierta como si estuviera alimentando a los pájaros", añadió.

Es difícil encontrar a alguien en el Gobierno que dé una cifra sobre la cantidad que se paga en sobornos para conseguir contratos gubernamentales, pasaportes u otros documentos oficiales. Sólo Somalia y Birmania superaron los índices de corrupción de Irak en 2008, de acuerdo con el organismo de control de la corrupción Transparencia Internacional.

El fin de junio marcará el comienzo de la retirada estadounidense de Irak, y será cuando las tropas de combate que invadieron el país para derrocar al ex dirigente Sadam Husein se retiren de las ciudades iraquíes y dejen la seguridad de los centros urbanos en manos de la Policía y el Ejército de Irak.

El primer ministro, Nuri al Maliki, y otros políticos, han alertado de que la red terrorista Al Qaeda y otros grupos violentos probablemente intenten aprovecharse de la retirada de Estados Unidos para lanzar más ataques en un intento de reiniciar la guerra sectaria.

Un ciudadano iraquí, Haider Abdul Muhsin, dice que cuando necesita conseguir que los responsables del Ministerio del Interior firmen documentos de identificación, tiene que dar dinero como si fuera confeti. "Desde la puerta de entrada, donde hay un guarda de seguridad, hasta que entro en la oficina, tengo que pagar dinero para que mis papeles de trabajo puedan ser procesados. Esto no es normal", apuntó.

MEDIDAS SEVERAS

Muhsin cree que la corrupción está detrás del estado ruinoso de su vecindario, donde las piscinas de aguas residuales permanecen entre las grietas del pavimento. Aunque comenzó hace tres años un proyecto de renovación, nunca se ha terminado. Muhsin dijo que escuchó que el constructor tomó el dinero y huyó. "Parece que mi distrito haya sido golpeado por un cohete", añadió.

Debido al aumento de acusaciones de corrupción contra los responsables del Ministerio del Interior, que supervisan los programas masivos de subsidios e importan miles de millones de dólares en trigo, arroz y azúcar cada año, Maliki prometió tomar medidas severas contra la corrupción.

El ex ministro de Comercio Abdul Falá al Sudany fue arrestado el mes pasado después de que el avión que le llevaba hasta Dubai fue obligado a regresar. Uno de sus hermanos también está bajo arresto y otro permanece a la fuga. El Ministerio ha negado que haya hecho alguna acción errónea.

"La corrupción financiera y administrativa es más peligrosa que el terrorismo porque el terrorismo mata a una persona o a dos, o incluso a 100, pero la corrupción mata a millones porque los priva de proyectos, de acceso a medicamentos (...), y desanima a los inversores internacionales", asegura un analista económico, Ghazi al Kinani.