JERUSALÉN, 10 Feb. (Reuters/EP) -
El Ejército de Israel ha asegurado que no tiene intención de empeorar todavía más la situación en Siria después de lanzar una docena de ataques dentro del país árabe, que ha justificado como una maniobra de defensa tras el derribo de uno de sus aviones F-16 que atacaba una instalación militar iraní dentro del país.
"Estamos dispuestos, preparados y somos capaces de cobrar un alto precio a cualquiera que nos ataque", ha declarado un portavoz militar, , el teniente coronel Jonathan Conricus, quien recordó que desde la mencionada instalación despegó un avión no tripulado que fue derribado por las fuerzas israelíes.
"Sin embargo, no estamos buscando escalar la situación. El de hoy ha sido un esfuerzo defensivo desencadenado por un acto de agresión iraní y estamos defendiendo nuestro espacio aéreo, nuestra soberanía y a los civiles", ha añadido el portavoz, Jonathan Conricus, en una nota recogida por Reuters.
El portavoz militar ha advertido que "los sirios y los iraníes están jugando con fuego desde nuestro punto de vista". "Los sirios juegan con fuego cuando permiten a los iraníes atacar a Israel desde su suelo", ha advertido. "El Ejército israelí seguirá actuando contra cualquier intento de infiltrarse en el espacio aéreo de Israel y actuará con determinación para impedir cualquier violación de la soberanía israelí", ha añadido.
De momento, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, y su ministro de Defensa, Avigdor Lieberman, acaban de terminar una reunión de emergencia en la que el mandatario ha dado orden a sus ministros de que "no hablen sobre la situación en el norte de Israel" hasta que las circunstancias lo permitan, según el diario hebreo 'Haaretz'.
La situación ha provocado que las autoridades aeroportuarias israelíes hayan dado orden de cerrar el espacio aéreo de la localidad de Shefayim, en el norte de Israel y próximo a Siria. "Todo ese espacio aéreo ha sido clausurado", según la nota, recogida por la agencia oficial de noticias rusa, RIA Novosti.
