JERUSALÉN, 1 Ene. (EP/AP) -
El primer ministro israelí, Ariel Sharon, será sometido a un cateterismo este jueves, según anunció hoy su oficina. Sus médicos habían informado de que Sharon, que recientemente sufrió un leve infarto cerebral, sería sometido a esta intervención de corazón en las próximas semanas para eliminar el riesgo de que sufra un nuevo infarto.
Los médicos descubrieron el pasado 18 de diciembre un pequeño orificio de dos milímetros en el corazón del primer ministro, una dolencia congénita que afecta a entre el 15 y el 20 por ciento de la población, indicaron estas fuentes.
El pasado lunes, los médicos de Sharon anunciaron que éste se sometería en las próximas dos o tres semanas a un cateterismo para tapar el pequeño orificio, detectado después de haber sufrido el leve infarto cerebral.
La operación pretende "prevenir futuros coágulos de sangre", dijo uno de los doctores, Tamir Ben Hur, citado por la edición digital del diario 'Haaretz'. Los médicos aseguraron que Sharon no ha sufrido ningún daño cerebral como consecuencia del infarto leve que obligó a hospitalizarle el día 18 y está "exactamente en el mismo estado que el día antes de ser hospitalizado", según Ben Hur.
Los médicos sospechan que este orificio del corazón, que es un problema congénito, fue la causa del coágulo que le provocó el infarto cerebral. La intervención que se le practicará, aseguraron, dura apenas 30 minutos y no requiere cirugía. Consiste en insertar un catéter a través de un vaso sanguíneo para tapar el agujero.
Los doctores están seguros de que Sharon, de 77 años, se recuperará plenamente del infarto leve que sufrió y precisaron que en estos momentos su colesterol y sus niveles de presión sanguínea son normales. Afirmaron también que el primer ministro ha perdido tres kilos de los 115 que, según la televisión Canal 10, pesaba.
La conferencia de prensa de los médicos para difundir los resultados de las pruebas practicadas a Sharon fue organizada por la propia oficina del primer ministro y fue valorada por algunos como un esfuerzo de transparencia, ante el temor de que Sharon, que se prepara para aspirar a un tercer mandato como primer ministro, no esté en condiciones de asumir el rato.
Sin embargo, el parlamentario del Likud --el partido que Sharon acaba de abandonar-- Michael Eitan tachó las informaciones de "manipulación" y reclamó que se difundan no sólo los resultados de los análisis, sino también una evaluación neurológica que aclare si el infarto ha dañado sus capacidades.
