MADRID, 26 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Kenia, Mwai Kibaki, y el primer ministro, Raila Odinga (en la imagen), finalizaron ayer sin acuerdo la primera de las reuniones que mantendrán los próximos días para formar el gobierno de coalición, según anunció el ex líder opositor al salir del encuentro.
Odinga declaró a los medios de comunicación que esperaban a la salida que de momento han explorado el terreno, pero que necesitan celebrar más consultas, y remarcó que no sabe cuándo podrá anunciarse el nuevo gabinete, informa el diario local 'Daily Nation'.
El líder del Movimiento Democrático Naranja (ODM, por sus siglas en inglés) subrayó que las conversaciones continuarán hasta que se estructure el gobierno. En esta ocasión, Odinga llegó a la residencia presidencial en torno a las once de la mañana y se marchó dos horas y media después.
Los dos líderes se comprometieron oficialmente a formar un gobierno de coalición para poner fin a los dos meses de crisis política y étnica que estalló tras las elecciones presidenciales de diciembre y que provocó más de 1.000 muertos y unos 350.000 desplazados después de que la oposición acusara a Kibaki de cometer fraude para resultar reelegido.
El acuerdo, firmado el 28 de febrero tras más de un mes de negociaciones con la mediación del ex secretario general de la ONU Kofi Annan, fue ratificado la semana pasada por amplia mayoría en el Parlamento keniano, donde el ODM tiene la mayoría de los escaños, allanando así el camino a su implementación.
OPTIMISMO ENTRE LA POBLACIÓN
Una encuesta realizada en Kenia muestra que el optimismo se ha extendido entre la población con vistas a la formación del nuevo gobierno de unidad. El 90 por ciento expresó su confianza en que el acuerdo llevará a una paz duradera y sólo un dos por ciento cree que el acuerdo no tendrá éxito.
Según el diario 'The Standard', el sondeo también revela que una amplia mayoría de la población está en contra de la violencia, traducida en enfrentamientos políticos y étnicos, que se extendió por el país después de los comicios, pero el 70 por ciento considera que demostraron la "gran desilusión" de los kenianos tras las elecciones.
La violencia y los desplazamientos son dos de los problemas que más preocupan a los kenianos, por lo que más del 70 por ciento expresó su satisfacción por el acuerdo de paz entre Kibaki y Odinga y su confianza en que el mismo "superará la prueba del tiempo y hará que Kenia vuelva a ser un Estado pacífico", indica el informe.
