BEIRUT, 20 Dic. (EP/AP) -
Un juez libanés presentó hoy cargos contra tres periodistas a los que acusa de haber irrumpido en un apartamento de un testigo en la investigación del asesinato del ex primer ministro libanés Rafik Hariri en Beirut, según informaron fuentes judiciales, y de haber robado documentación relativa a la investigación.
En este sentido, el juez Elias Eid presentó cargos por allanamiento de morada en el apartamento de Mohammed Zuhair Siddiq y "manipulación de pruebas criminales" contra el periodista de la televisión local New-TV, Firas Hatoum, así como a su cámara y asistente.
Los tres periodistas fueron detenidos el viernes pasado, aunque fuentes oficiales subrayaron que éstos serán trasladados a una prisión suburbana ubicada en el este de Beirut, sin dar detalles sobre la condena a la que podrían enfrentarse los periodistas en caso de que un Tribunal fallara en su contra.
Por su parte, Siddiq, de origen sirio, fue liberado de una cárcel francesa el pasado mes de febrero por falta de garantías de que, de ser extraditado a Líbano, no se enfrentara a la pena capital. Fue detenido en octubre de 2005 mientras la comisión de la ONU investigaba el asesinato de Hariri y aconsejara su arresto después de determinar su falso testimonio ofrecido a dicha comisión.
Fuentes judiciales explicaron que agentes de la policía secreta vigilaban el apartamento de Siddiq y fotografiaron a Hatoum y su equipo entrando por una de las ventadas del domilicio.
Asimismo, dichas fuentes confirmaron que los tres periodistas admitieron haber robado documentos del apartamento que, por su parte, fueron devueltos a la judicatura.
Por su parte, la editora de la cadena New-TV, Mariam al Bassam, reconoció que Hatoum había entrado ilegalmente en el apartamento del testigo "con el objetivo de tomar fotografías del edificio desde fuera, pero Firas fue convencido por el propietario del edificio y otros que le dijeron que podía entrar en el apartamento", aseguró a Associated Press.
No obstante, justificó la "mala decisión" del atropello cometido por Hatoum por su "entusiamo periodístico" y rechazó que hubiera robado cualquier documento relevante a la investigación sobre el asesinato de Hariri.
