Liberia.- La nueva ley forestal liberiana permitirá recuperar unos recursos con que se financió la guerra, según la FAO

Actualizado: jueves, 5 octubre 2006 22:54

ROMA, 5 Oct. (EUROPA PRESS) -

Liberia ha aprobado una nueva ley forestal que permitirá poner fin a un largo período de mala gestión y de explotación salvaje de sus recursos forestales para financiar el conflicto armado, según informó hoy la Organización para la Alimentación y la Agricultura de la ONU (FAO).

"La nueva legislación permitirá la puesta en marcha de la primera política forestal con la que cuenta el país", según la FAO, que ha colaborado en esta iniciativa junto con otros socios internacionales --como el Banco Mundial-- a través de la Iniciativa Forestal de Liberia.

Entre 1989 y 2003, los ingresos procedentes de los recursos forestales se utilizaron para financiar a los bandos enfrentados en el largo conflicto civil, por lo que en julio de 2003 el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas se vio obligado a imponer sanciones a las exportaciones de madera liberiana por un período de tres años.

Cuando la comunidad internacional intervino para mejorar la gestión forestal, el sector se encontraba en el caos más completo, según recuerda la FAO. No existían un grupo directivo con experiencia, ni la capacidad de hacer cumplir la normativa, y había muy poca conciencia de la importancia de una buena gestión pública. Un sistema de concesiones distorsionado había llevado el sector a una situación de fraudes generalizados.

"La nueva política forestal intenta aprovechar al máximo los beneficios del sector en beneficio del pueblo liberiano, y poner fin al uso de los bosques para financiar conflictos", aseguró Adrian Whiteman, un experto forestal de la FAO que trabajó en el proyecto. "La Autoridad liberiana de Desarrollo Forestal se encuentra ahora en posición de recuperar el control sobre los recursos forestales", añadió.

Los bosques de Liberia son importantes para su economía y ocupan un 47 por ciento de su superficie terrestre. A finales de la década de los noventa, aportaban cerca del 20 por ciento del producto interior bruto y más de un 50 por ciento de sus ingresos por exportaciones.