MINSK, 23 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente bielorruso Alexander Lukashenko arremetió hoy contra la "presión sin precedentes" de Occidente sobre su país y mostró su preocupación por el hecho de que el precio de la energía, que continúa incrementando, esté perjudicando a la nación.
Lukashenko, quien resultó reelegido para su tercer mandato en las elecciones del pasado marzo, que la oposición y los países occidentales calificaron de fraudulentas, ha sido sancionado por Estados Unidos y la Unión Europea, con la congelación de sus bienes en el extranjero y la negativa de visado para entrar en sus territorios.
Sin embargo, una de las mayores preocupaciones para Bielorrusia es la decisión de su tradicional aliado, Rusia, de triplicar el precio del gas que vende a Minsk, lo que tendrá un efecto serio sobre la economía del país, y podría debilitar a Lukashenko.
"Dos factores están perjudicando a Bielorrusia, la presión sin precedentes de Occidente y el aumento de los precios de la energía", señaló el presidente en su discurso del estado de la nación ante el Parlamento.
El mandatario aseguró que anunció que apelará ante todos los tribunales internacionales, incluido el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, las restricciones de movimiento impuestas por la UE y Estados Unidos.
"¿Cuáles son las bases de esas restricciones? ?Hay algún tribunal internacional que haya determinado que los funcionarios bielorrusos son criminales? No, eso es claro como el cristal", argumentó Lukashenko.
