PEKÍN, 12 Jun. (Reuters/EP) -
La Fiscalía china acusó a más de 20.000 personas de delitos medioambientales el año pasado y arrestó a más de 7.000, según ha informado este jueves la agencia de noticias Xinhua.
Las autoridades de la Fiscalía han asegurado que este año tomarán medidas, incluso más duras, contra las empresas contaminantes y las autoridades locales que las protegen, como parte de su "guerra contra la contaminación" en los tribunales. China, acusada de mirar hacia otro lado ante los delitos medioambientales, ha prometido mejorar las leyes e imponer sanciones financieras y criminales más duras para las empresas que violen las reglas de contaminación del Estado.
Según Xinhua, la Fiscalía ya ha establecido un "rápido mecanismo de respuesta" para tratar con los delitos medioambientales. Solo en marzo y abril, investigaron 228 casos y se aprobaron los arrestos de 1.375 personas. Alrededor de 349 personas han sido investigadas o procesadas durante los cuatro primeros meses de 2014 con cargos relacionados con negligencia medioambiental. El número de casos ha subido a 1.545 desde el comienzo del último año.
El 'número dos' de la Fiscalía, Li Zhongcheng, ha reconocido que las autoridades del Gobierno "han aceptado sobornos, han abusado del poder para aprobar proyectos contaminantes y han actuado como paraguas protector de los que contaminaban".
Pekín ha aprobado este año varias enmiendas a la Ley de Protección Medioambiental de 1989 que han dado a los inspectroales gran respaldo legal y una amplia variedad de armas contra la contaminación. China busca así fortalecer su capacidad de monitoreo, refuerzo y castigo.
Sin embargo, los expertos han pedido que los tribunales chinos y los Gobiernos locales, todavía carentes de capacidad, y los hombres de poder traten el elevado número de casos medioambientales.
