MADRID, 26 Nov. (EUROPA PRESS) -
Al menos doce personas murieron este miércoles en ataques contra localidades en el marco del estallido de violencia entre agricultores y pastores que sacude la provincia de Mayo Kebbi Este, en el suroeste de Chad, que ya ha sido condenada por el presidente, Idriss Déby.
Según el portal de noticias Alwihda Info, al menos doce personas han muerto en ataques contra localidades situadas en el departamento de Kabbia, en la citada provincia, durante los que también han sido destruidas viviendas y otras propiedades, así como reservas de alimentos.
El gobernador de la provincia, Bachar Ali Souleymane, decretó este lunes el toque de queda entre las 19.00 y las 5.00 horas en Kabbia bajo el argumento de la "necesidad imperiosa de mantener el orden".
Desde el martes están desplegados en la zona importantes efectivos de las fuerzas de seguridad con el fin de retomar el control. Según Alwihda, al menos 67 presuntos autores y cómplices en la violencia han sido detenidos y este miércoles fueron trasladados a Yamena, la capital. Entre ellos, ha precisado, figuran responsables administrativos y jefes tradicionales.
Así las cosas, Déby ha condenado "con fuerza los enfrentamientos mortales ocurridos en el departamento de Kabbia". En un mensaje publicado en su cuenta de Twitter, el presidente ha prometido que se depurarán "responsabilidades" y "todos los que sean puestos en tela de juicio responderán de sus actos".
"No hay ni habrá ninguna zona en la que no se respete el derecho en nuestra república", ha prometido el mandatario, que ofrecido sus condolencias a los familiares de las víctimas y deseado una pronta recuperación a los heridos.
Según relata el diario 'Journal du Tchad', los enfrentamientos estallaron el lunes en la localidad de Bélé y se han extendido desde entonces a otras. De acuerdo con los residentes, los pastores habrían arrasado los campos de algunos agricultores, quienes a su vez respondieron, desencadenando violentos enfrentamientos. Este medio apunta a que podría haber decenas de muertos.
Los enfrentamientos entre agricultores y pastores son recurrentes en algunos países de África y debido a los efectos del cambio climático se están recrudeciendo en algunos de ellos, ya que la escasez de agua y de pastos obliga a los segundos a tener que buscar nuevas áreas de pastoreo, lo que en general suele entrar en conflicto con los terrenos agrícolas.
