GINEBRA, 8 Sep. (Reuters/EP) -
El nuevo Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Raad al Hussein, ha instado este lunes a las nuevas autoridades iraquíes a unirse al Tribunal Penal Internacional (TPI) para que pueda juzgar los crímenes que se están cometiendo en el país.
La ONU, entre otras organizaciones, ha denunciado en los últimos meses que el Estado Islámico, que se ha hecho con el control de importantes zonas de Irak, ha cometido violaciones de los Derechos Humanos que podrían constituir crímenes de guerra.
"Se necesitan esfuerzos urgentes para proteger a los grupos étnicos y religiosos, a los niños, que se ven amenazados por los reclutamientos forzosos y por la violencia sexual, y las mujeres, que han sido objeto de graves restricciones", ha dicho.
A este respecto, ha subrayado que se refiere tanto a la población civil de Irak como de Siria, alertando de que se están convirtiendo en "conflictos crecientemente interconectados".
Al Hussein, que hasta ahora era el embajador de Jordania ante la organización internacional, también ha advertido de que cualquier país liderado por el Estado Islámico se traduciría en "un baño de sangre".
Se trata del primer discurso que Al Hussein pronuncia en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, con sede en Ginebra, desde que fue designado para suceder a la jurista sudafricana Navi Pillay en el cargo.
