Nuevos enfrentamientos entre efectivos del SWAT de Irak y grupos armados

Actualizado: viernes, 10 enero 2014 8:53

MADRID, 10 Ene. (EUROPA PRESS) -

Efectivos del SWAT de Irak se ha enfrentado una vez más a milicianos de grupos insurgentes en la localidad de Ramadi, ubicada en la provincia de Anbar, cuyo control recuperaron la Policía y las tribus locales durante la jornada del lunes tras expulsar de ella al Estado Islámico de Irak y el Levante (ISIS), vinculado a la organización terrorista Al Qaeda.

Los enfrentamientos han estallado poco después de que cuatro miembros del SWAT, integrado en el Ministerio del Interior y que responde directamente ante el primer ministro, Nuri al Maliki, fallecieran tras un atentado suicida contra una patrulla en el este de la ciudad, según ha informado la agencia iraquí de noticias NINA.

En base a estas informaciones, en los combates se ha empleado "todo tipo de armamento pesado, incluyendo morteros". Los enfrentamientos han continuado a primera hora de la madrugada del viernes sin que se sepa por el momento el número de víctimas provocadas por los mismos.

El ISIS, que ha reivindicado la autoría de numerosos atentados contra las fuerzas de seguridad en los últimos meses, se hizo la semana pasada con el control de Ramadi y Faluya, donde aún permanece, en medio de un importante despliegue del Ejército en sus alrededores.

Tanto las fuerzas de seguridad como los responsables tribales han reconocido que Al Maliki mantiene paralizada la ofensiva del Ejército a la espera de ver si los esfuerzos de los grupos locales surten efecto y los combatientes del ISIS abandonan la zona.

El miércoles, Al Maliki prometió que "arrancará de raíz" a Al Qaeda y se mostró convencido de la victoria. En un mensaje televisado, también agradeció a la comunidad internacional su apoyo en la lucha contra Al Qaeda e instó a los miembros del grupo y a quienes les apoyan a rendirse, prometiendo clemencia.

La salida de las tropas estadounidenses del país y el conflicto en Siria, con fuertes connotaciones sectarias, ha exacerbado las tensiones entre la comunidad suní y el Ejecutivo de Al Maliki, que tienen como puntos de fricción un sistema judicial que discrimina sistemáticamente a los suníes y la exclusión de esta comunidad de los altos cargos de la Administración iraquí.

No en vano, los enfrentamientos violentos con tintes sectarios entre la minoría suní y la dominante comunidad chií ya eran una tónica habitual, reminiscencia de los años de guerra en Irak tras la ocupación estadounidense --especialmente entre los años 2006 y 2007--.

Los levantamientos populares contra el Gobierno, asimismo, encontraron su germen en la ola de levantamientos de 2011 en Oriente Próximo y el norte de África, conocida como la 'Primavera Árabe', que empujó a los suníes a rebelarse pacíficamente contra Al Maliki.

Leer más acerca de: