NUEVA YORK, 1 Sep. (EUROPA PRESS) -
Alemania asume en septiembre la presidencia rotatoria del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, tiempo durante el cual establecerá como prioridades la situación en el mundo árabe, los efectos de la guerra sobre la población infantil, y el conflicto en Afganistán.
Desde el 6 al 26 de septiembre, el Consejo de Seguridad debatirá la situación en estos tres ámbitos, y de manera adicional, realizará consultas sobre la situación en el Sahel, Malí, Sierra Leona, Liberia y el conflicto abierto entre Sudán y Sudán del Sur por la posesión y distribución del petróleo en la frontera. Igualmente, "la situación en Siria seguirá en la agenda" de discusiones.
El 19 de septiembre, la Representante Especial de Naciones Unidas para Niños y Conflictos Armados, Leila Zerrugi, y el jefe del Departamento de Operaciones de Paz, Herve Ladsous, informarán al Consejo de Seguridad sobre la situación de los niños en un ambiente bélico para buscar nuevas estrategias de perseguir a los responsables de las múltiples violaciones de los derechos de los niños durante los conflictos armados.
Un día después, el 20 de septiembre el Consejo de Seguridad debatirá los progresos realizados por la misión de la ONU en Afganistán (UNAMA) como "actor fundamental en los últimos acontecimientos" en el país centroasiático. El responsable de informar al Consejo será el representante especial del Secretario General para Afganistán, Jan Kubi.
El próximo día 26, se celebrará una "reunión de alto nivel" para estudiar los recientes acontecimientos en el mundo árabe, en especial en los estados miembro de la Liga Árabe, con los que se busca fortalecer la relación que mantienen con Naciones Unidas. Sobre la situación en Siria, Alemania recuerda en su comunicado que "ha presionado en repetidas ocasiones para adoptar una postura unida sobre la estrategia a adoptar frente al régimen de (el presidente sirio) Bashar al Assad"
