NUEVA YORK, 22 Ago. (EUROPA PRESS) -
El secretario general adjunto para Asuntos Políticos de la ONU, Ibrahim Gambari, subrayó hoy la necesidad de dar un nuevo impulso al proceso de paz de Oriente Próximo después de un año de estancamiento "inaceptable" que ha socavado las expectativas de la población afectada.
En su informe mensual ante el Consejo de Seguridad de la ONU, Gambari señaló que los sondeos sugieren una drástica caída de la confianza de israelíes y palestinos en el proceso de paz y en las perspectivas de un acuerdo negociado entre ambas partes.
El diplomático insistió en que la comunidad internacional y el Consejo de Seguridad deben hacer un nuevo esfuerzo para "llevar paz y estabilidad a la región en su conjunto".
Entre los factores que impiden ver la paz como un objetivo alcanzable, citó las crecientes diferencias entre las partes, la degradación de la Autoridad Nacional Palestina, y el sufrimiento, destrucción y muerte causados por la violencia tanto de israelíes como de palestinos.
Gambari indicó además que durante el último año han muerto 41 israelíes, mientras que 480 han resultado heridos por ataques palestinos. Por parte palestina, han perdido la vida 450 personas y 2.500 sufrieron lesiones de diversa consideración.
Agregó que, además de la violencia, ha influido negativamente en la confianza la guerra entre Israel y la milicia chií libanesa Hezbolá. En este sentido, advirtió de que "el resultado podría ser, por un lado, una mayor radicalización y apoyo a la violencia y el terror; y por otro, un mayor respaldo a las acciones militares, al uso excesivo de la fuerza y a las medidas unilaterales".
"Las diversas posturas se están endureciendo y podrían endurecerse aún más a menos que se reinstaure un proceso político creíble", puntualizó el secretario general adjunto.
