Caritas Internacional lleva a cabo dos programas paralelos en Darfur y Líbano con un presupuesto de 8 y 15 millones de dólares respectivamente
ROMA, 26 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Caritas Internacional, Denis Vienot, denunció hoy que "el modo agresivo de Israel hacia Líbano es escandaloso", aprovechando su estancia en Roma, donde hizo un balance de las principales crisis internacionales y la necesidad de intervención en las diferentes regiones del mundo.
Respecto a Líbano, subrayó que "las violaciones de los derechos humanos que se dan en el Líbano, en especial al sur, son terribles". "Encontré una presencia muy fuerte de la Iglesia. Mantuve un encuentro con el obispo greco-católico del sur del Líbano que está allí desde hace 20 años resolviendo muchas dificultades. La Iglesia está muy presente, pero la vida allí es muy difícil", admitió.
El Presidente de Caritas Internacional explicó un proyecto que se está llevando a cabo en las dos partes del mundo, en la región sudanés de Darfur y Líbano, zonas que insistió constituyen "las más difíciles del actual momento histórico". Mientras que el programa del Líbano cuenta con un presupuesto de ocho millones de dólares, el que se implantará en Darfur asciende a 15 millones de dólares.
"Caritas Internacional es muy activa en Darfur y en el Líbano. En Darfur estamos siguiendo un programa muy original en el contexto de inseguridad. Este es un tema del todo fundamental. Por lo tanto desde la organización católica de Caritas y desde las organizaciones protestantes es un problema ecuménico con continuas peticiones de los Obispos del Sudan que entienden que es muy importante que en estos países de mayoría musulmana las iglesias trabajen unidas", explicó.
PROGRAMA PARA LOS DESPLAZADOS
En este sentido, subrayó que se trata de un programa pensado especialmente para los desplazados, ya que, incidió, "existen dos millones de desplazados en Darfur". Así, explicó que el programa comprende a 270.000 personas "confinadas en campos que se están convirtiendo en auténticas ciudades", centrado en el reparto de alimentos obtenidos del Programa de Alimentación Mundial (PAM), así como en la ayuda médica, escuelas de formación y actividad económica de distribución de materiales a los desplazados.
En el Líbano, según Denis Vienot, se lleva a cabo el mismo proyecto pero en una fase más avanzada. "Después de la primera de emergencia del pasado verano, cuando la situación era catastrófica, hoy nos encontramos en una fase de reconstrucción, sobre todo hacia las comunidades del sur, en especial a las comunidades cristianas", aseguró.
El programa, que cuenta con la colaboración de Caritas en Líbano, comprende fundamentalmente "ayudas en el campo de la salud con la formación de ambulatorios y dispensarios móviles para poder ayudar también a las poblaciones de los pueblos". Asimismo, el programa cuenta con "bolsas de estudio" e incurren en "el ámbito del impulso en la actividad económica".
Caritas Líbano acaba de recibir "la orden del cedro", un reconocimiento del Gobierno libanés y "condecoración que representa todo un símbolo". Durante el galardón, Vienot pudo constatar "cómo en la sociedad del Líbano los cristianos y Caritas son organismos de actividad social y de servicio reconocidos por todos y por todos apreciados".
En Líbano el gran interrogante entre los cristianos es el equilibrio entre las comunidades suní y chií además de los cristianos. Según Denit Vienot "el número de cristianos en el Líbano, como en muchos de los países de Oriente Próximo, ha disminuido muchísimo". Así, explicó que mientras que "los cristianos en Líbano, los maronitas y los otros ritos quieren permanecer en el país", surgen situaciones "un poco particulares" dada la existencia de "estas facciones de la sociedad que en realidad colaboran bien, pero después a intervalos regulares se manifiestan diversas crisis".
