Los países en PESCO detallarán su contribución a grupos de combate con cuatro años de antelación

Publicado: lunes, 15 octubre 2018 13:30

BRUSELAS, 15 Oct. (EUROPA PRESS) -

Los países que se han sumado a la cooperación permanente en defensa (PESCO) --todos los de la UE menos Reino Unido, Dinamarca y Malta-- se han comprometido a detallar sus contribuciones a los grupos de combate de la Unión Europea con cuatro años de antelación de aquí a 2020 y a participar en un proyecto para mejorar las capacidades de ciberseguridad según consta en la recomendación adoptada este lunes.

España y otros 24 países de la UE asumieron una veintena de compromisos vinculantes de aquí a 2024 cuando lanzaron la PESCO en diciembre, incluido aumentar el gasto en defensa de manera progresiva en términos reales para alcanzar "los objetivos acordados" --elevar el gasto en investigación hasta el 2% del gasto total de defensa y al 20% para inversión y destinar el 35% a proyectos colaborativos--, así como participar en operaciones militares de la UE, incluido a los grupos de combate tácticos y simplificar el transporte militar transfronterizo para permitir el despliegue rápido de fuerzas y equipos entre otros.

Los grupos de combate tácticos son grupos de respuesta rápida multinacionales de unos 1.500 efectivos de distintos componentes -terrestre, apoyo aéreo, logístico, médico, combate-- para poder llevar a cabo misiones de gestión de crisis autónomas de la UE o para apoyar la fase inicial de operaciones mayores, normalmente bajo mandato de la ONU, aunque desde su creación en 2004 nunca han sido desplegados, por falta de financiación común y de voluntad política.

En una recomendación aprobada este lunes por los ministros de Exteriores en Luxemburgo, los países de la PESCO se han comprometido a confirmar sus contribuciones a los grupos de combate de la UE "en principio al menos con cuatro años de antelación y preparar y formar a las fuerzas y capacidades participantes" y a actualizar los datos de forma semestral en sus planes nacionales.

También se comprometen a aportar "una parte justa" de capacidades para las operaciones militares de la UE, de forma proporcional, en la medida de sus medios y capacidades. Pero dejarán para principios de 2020 decisiones sobre la financiación común de las operaciones militares.

La recomendación adoptada detalla los objetivos más precisos que deberán cumplir de aquí al 2020 en virtud de los compromisos asumidos y la tendrán en cuenta cuando presenten sus planes nacionales de defensa actualizados, como muy tarde el 10 de enero. Además, adoptarán una recomendación ulterior en 2021 para detallar objetivos más precisos para la segunda fase.

COMPROMISOS DE GASTO

Por lo que se refiere a los compromisos de gasto, los países de la PESCO facilitarán datos "pormenorizados" de la evolución de su gasto total en defensa en términos reales en comparación con el año anterior y sus expectativas de gasto para años posteriores.

También detallarán como alcanzar el objetivo colectivo de destinar el 20% en inversión en defensa (contratación pública e investigación y desarrollo), el 20% del gasto total a investigación y tecnología y el 35% en equipos en el marco de proyectos colaborativos.

PROYECTOS DE CAPACIDADES

En el caso de las capacidades militares, los países indicarán en sus respectivos planes nacionales para finales de 2020 los proyectos de desarrollo de capacidades colaborativos en los que participan o tienen previsto para atender las capacidades identificadas como prioritarias, la ayuda europea que reciben y en la medida de lo posible el porcentaje de inversión nacional.

"Los Estados miembros participantes demostrarán que las estrategias de adquisición aplicadas entre 2018 y 2020 han tenido un impacto positivo en la base tecnológica e industrial de la defensa europea", reza la recomendación, que incide en la necesidad de avanzar en la autonomía estratégica de Europa y reforzar la base tecnológica e industrial de la defensa europea (BITDE).

CIBERDEFENSA Y MOVILIDAD MILITAR

En el caso de las capacidades de defensa cibernética, "de aquí al 2020 cada Estado miembro participante debe haber indicado su intención de participar en un proyecto de la PESCO en materia de defensa cibernética" y detallar los recursos destinados a cooperación en ciberdefensa. También deberán haber prestado apoyo a otros países contra las amenazas informáticas, por ejemplo a través del intercambio de información.

A fin de facilitar el movimiento transfronterizo de fuerzas y equipos, los países deberán contar como muy tarde para finales de 2019 con una estrategia nacional para facilitar la movilidad militar.