QUETTA (PAKISTÁN), 18 Ene. (EP/AP) -
Las oficinas de la ONU en la provincia suroeste pakistaní de Baluchistan reanudan su funcionamiento hoy por la tarde después de permanecer cerradas durante casi tres días por culpa de una amenaza telefónica que advirtió que Al Qaeda podría atentar contra los efectivos de la organización, según informó el coordinador de ayuda humanitaria de la ONU en Pakistán, Jan Vandemoortele.
"Los empleados volverán al trabajo el miércoles por la tarde en algunas oficinas de la ONU en la provincia de Baluchistan", dijo Vandemoortele, quien añadió que "El personal al completo volverá a sus tareas mañana".
"Todo ha sido comprobado y nuestras operaciones se reanudarán gradualmente", declaró. "La amenaza resultó no ser verdadera, apostilló.
Por otro lado, el inspector general de la Policía de Baluchistan, Chaudhry Mohammed Yaqoob, informó que las medidas de seguridad en las oficinas de la ONU y en otras agencias de ayuda humanitaria serán incrementadas.
"El personal policial adicional ha sido desplegado en sus oficinas y la Policía comenzó a revisar los vehículos que pasan en los alrededores de las oficinas", dijo el inspector añadiendo que la Policía está trabajando para identificar al autor de la llamada.
La llamada fue recibida el lunes en la oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) y la organización decidió cerrar temporalmente todas sus oficinas en la provincia. Además, se produjo el mismo día del atentado suicida sangriento en la cercana frontera de Pakistán en la provincia de Kandahar, donde murieron al menos 21 personas y unas 30 fueron heridas, lo que otorgó credibilidad a la llamada.
