P.Bajos.- El Gobierno holandés anuncia que destinará 28 millones de euros a combatir la radicalización

Actualizado: lunes, 27 agosto 2007 21:12

AMSTERDAM, 27 Ago. (EP/AP) -

El Gobierno holandés destinará 28 millones de euros durante los próximos cuatro años a prevenir la radicalización y el crecimiento del fundamentalismo islámico y del nacionalismo de derechas, según informó hoy la ministra de Interior, Guusje ter Horst.

La ministra explicó que el plan se centra en financiar los programas ya existentes en colegios y barrios para detener lo que el Gobierno percibe como un "problema creciente" de radicalización de la juventud holandesa. La meta no es combatir a los grupos extremistas --labor de los servicios de inteligencia y de las fuerzas de seguridad-- sino prevenir que se lleguen a formar desde un principio, indicó.

"El objetivo es que todas las organizaciones que tratan con la juventud, y que perciban señales de radicalización, compartan esa información, y que algo se haga para detenerlo", agregó Ter Horst, quien describió una mezcla de "medidas suaves", como el patrocinio de debates multiculturales y la creación de prácticas laborales, y "medidas duras", que incluyen reducir el abstentismo escolar y aumentar la vigilancia en las calles.

"Un profesor que se dé cuenta de que ciertos estudiantes manifiestan señales racistas o fundamentalistas deben poder llamar a una línea de asistencia telefónica para pedir consejo, por ejemplo", dijo la ministra, y reconoció que el plan no incluye "ningún descubrimiento importante", pero defendió los programas actuales como "muy importantes" y que merecen más apoyo. "Lo que es nuevo es que se trata de un enfoque integrado", concluyó Ter Horst.

De acuerdo con el Instituto Ana Frank, que analiza los crímenes por motivos de odio, el número de incidentes racistas en Países Bajos aumentaron abruptamente después del asesinato del director de cine Theo van Gogh a manos de un extremista musulmán, en noviembre de 2004. Sin embargo, en los siguientes dos años el número de ataques racistas registrados cayó un diez por ciento, de 296 en 2005 a 265 en 2006.