TOKIO, 24 Oct. (Reuters/EP) -
El primer ministro de Japón, Shinzo Abe, se ha reunido este jueves con su homólogo surcoreano, Lee Nak Yon, para hablar de las disputas históricas y comerciales entre ambos países, una cuestión que ha ido lastrando las relaciones bilaterales.
La tensión entre Tokio y Seúl, dos aliados de Washington, se han visto deterioradas desde que el Supremo de Corea del Sur ordenó el pasado mes de octubre a varias empresas japonesas compensar a los surcoreanos que realizaron trabajos forzosos durante la Segunda Guerra Mundial cuando Japón ocupó Corea.
Japón, por su parte, insiste en que dicho asunto quedó zanjado con el tratado de 1965, que normalizó las relaciones entre los países. Así, tilda la decisión de violar el Derecho Internacional en el marco de una disputa que se ha extendido ya al comercio y la seguridad.
Un centenar de periodistas estaban presentes cuando comenzaron las conversaciones, las de más alto nivel que se producen entre las partes desde que comenzó la disputa.
Varios medios de comunicación señalaban que Lee, que se encontraba en Tokio para asistir a la entronización de Naruhito, entregaría una carta a Abe de parte del presidente surcoreano, Moon Jae In. Moon y Abe no se han reunido desde hace más de un año.
La enemistad entre los dos países está vinculada a la ocupación de Japón de la península de Corea entre 1910 y 1945, el uso de trabajos forzosos por parte de compañías japonesas, así como de las conocidas como 'mujeres de confort' --utilizadas como esclavas sexuales durante el periodo colonial-- y la atribución de la soberanía de islotes.
COOPERACIÓN ENTRE LAS PARTES
En relación con la cuestión norcoreana, Abe ha recalcado que los dos países constituyen vecinos importantes en la región, por lo que es de gran importancia que trabajen de forma conjunta para abordar el problema que supone el programa nuclear de Pyongyang.
Abe y Lee han acordado así impulsar la cooperación junto a Estados Unidos para resolver la cuestión de la desnuclearización de Corea del Norte.
Además, el dirigente nipón ha lamentado que las relaciones entre Seúl y Tokio estén en una grave situación y ha instado a mejorarlas en vez de dejarlas así.
