SEÚL, 2 Feb. (Reuters/EP) -
El Gobierno norcoreano ha recordado a Seúl que la reanudación de los simulacros militares entre Corea del Norte y Estados Unidos -- que Corea del Norte interpreta como una amenaza contra su seguridad -- afectarán a los avances diplomáticos entre los países vecinos, que acudirán a los próximo JJOO de invierno bajo la misma bandera.
"Cualquier ejercicio militar en la zona amenaza gravemente a la península. La desconfianza y la confrontación entre ambas Coreas alcanza su punto álgido, y los diálogos que tanto costó abrir acaban envueltos en enormes dificultades y obstáculos", ha explicado el ministro de Exteriores, Ri Yong Ho, en una misiva recogida por los medios nacionales.
"Nosotros", ha proseguido, "queremos hacer todo el esfuerzo posible para mejorar las relaciones entre las dos Coreas, pero no vamos a quedarnos de brazos cruzados mientras, de manera siniestra, arrojan un cubo de agua fría sobre nuestros esfuerzos".
En la carta, el Norte también acusa a EEUU -- que ha aplazado los ensayos hasta después de los Juegos -- de "engañar" a la opinión pública al atribuirse el mérito del retorno de Corea del Norte a las negociaciones obligada por las sanciones de Washington.
"El hecho de que se haya producido un punto de inflexión dramático para la paz y la estabilidad, la reconciliación y la cooperación nacionales y la reunificación en la península coreana se debe enteramente al noble amor por la nación hacia el (líder norcoreano) Camarada Kim Jong Un", ha explicado el ministro.
Poco después, los medios estatales del Norte también acusaron a Estados Unidos de crear una "etapa de confrontación" en los Juegos Olímpicos, diciendo que las conversaciones intercoreanas y los resultados positivos que se derivan de ellos podrían "desaparecer" después de los Juegos.
