RDCongo.- Nkunda asegura que en caso de ser procesado por el TPI podrá demostrar su "inocencia"

Actualizado: jueves, 27 marzo 2008 13:15

MADRID, 27 Mar. (EUROPA PRESS) -

El general disidente tutsi y líder del Congreso Nacional para la Defensa del Pueblo (CNDP), Laurent Nkunda, ha asegurado que está dispuesto a demostrar su "inocencia" en caso de que sea transferido al Tribunal Penal Internacional (TPI) para responder por los presuntos crímenes de guerra perpetrados en el este de la República Democrática de Congo (RDC).

"Una investigación seria demostrará mi inocencia", declaró en una entrevista exclusiva publicada hoy por el diario holandés 'Trouw'. "Incluso si debo ir a La Haya (sede del TPI) se verá que no hay nada contra mí", añadió.

El pasado mes de febrero, el fiscal jefe del TPI, Luis Moreno Ocampo, anunció, sin citar expresamente a Nkunda, que se abriría una investigación sobre "crímenes cometidos en este de la RDC, en particular en las provincias de Kivu".

Según 'Trouw', "numerosas personas culpan a Laurent Nkunda de la continuidad de los conflictos en el este de Congo", que han causado más de 800.000 desplazados. El diario holandés asegura que está acusado de la muerte, el pasado mes de enero, de 30 hutus congoleños. "El TPI intenta recopilar pruebas contra él sobre crímenes de guerra y crímenes contra la Humanidad", indica el rotativo.

Nkunda, prosigue 'Trouw', dispone de un pequeño ejército mediante el cual administra "un mini Estado", donde cobra impuestos y ha instaurado un sistema judicial.

LOS KIVUS Y NKUNDA

Kivu Norte y Kivu Sur, dos provincias fronterizas con Ruanda que abarcan la gran región que rodea al lago Kivu, fueron el escenario desde 2000 de los enfrentamientos entre el Ejército de la RDC, las Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda (FDLR) y los diversos grupos armados formados por renegados del Ejército --como es el caso de Nkunda-- o por milicias rebeldes.

En todos estos años y en todas sus etapas, el conflicto en la región se ha caracterizado por abarcar toda la gama posible de violaciones de Derechos Humanos y del Derecho Internacional Humanitario posibles en una guerra sin control como la que ha sufrido y sufre la RDC, como ejecuciones extrajudiciales, violaciones de mujeres, detenciones arbitrarias, reclutamiento de niños soldados y torturas.

El tutsi Laurent Nkundabatware (más conocido como Laurent Nkunda), de 41 años de edad, ocupa un lugar tristemente destacado en este tipo de hechos. Antiguo estudiante de psicología y devoto cristiano pentecostal, Nkunda se unió durante el genocidio ruandés de 1994-1995 al Frente Patriótico Ruandés (FDR) en su lucha contra el Ejército y el Gobierno de este país, controlado por entonces por los hutus.

Al término de la guerra, que dio la victoria a los tutsis y tras la cual miles de hutus se instalaron en el este de la RDC, regresó a Congo, donde combatió en un primer momento en las filas del presidente Laurent-Desiré Kabila y de su hijo y actual mandatario Joseph Kabila en su lucha contra el dictador Mobutu.

Fue el inicio de la sangrienta 'primera guerra mundial africana', que comenzó en agosto de 1998 con la invasión de las tropas de Ruanda, Uganda y Burundi y que causó directamente alrededor de cuatro millones de muertos, el mayor número de víctimas registrado en el planeta desde la Segunda Guerra Mundial.

Una vez derrocado Mobutu, Nkunda luchó contra el Gobierno de Kinshasa entre 2000 y 2003 en las filas de la formación rebelde Agrupación Congoleña por la Democracia (RCD), con el apoyo de Ruanda, Uganda, Burundi y otros grupos tutsis. En mayo de 2002, Nkunda fue acusado de la masacre de 160 personas en Kisangani, por lo que la entonces alta comisionada de la ONU para Derechos Humanos, Mary Robinson, ordenó su detención. El militar respondió acusando a la ONU de no haber hecho nada para impedir el genocidio ruandés de 1994.

En 2003, Nkunda se incorporó al Ejército, tras la constitución del Gobierno de Transición, y en 2004 alcanzó el rango de general. No obstante, poco después mostró su rechazo al Gobierno de Kinshasa y junto a milicianos de la RCD-Goma fundó en 2005 el CNDP (considerado el 'caballo de Troya' de Ruanda en la RDC) en defensa de los derechos de la minoría tutsi, que, según él, estaban siendo pisoteados por los hutus.

En diciembre de 2006 se sublevó en las selvas de Masisi, en Kivu Norte, y en agosto de 2007, Nkunda constituyó su propio gobierno 'de facto' en la zona, con sus instituciones policiales, su propia cadena de radio, su sistema de impuestos, su propia bandera, su propio 'país' (la 'Tierra de los Volcanes') y su propio partido único, el CNDP.

Desde entonces, las fuerzas de Nkunda han sido acusadas de gravísimas violaciones de Derechos Humanos, como asesinatos, violaciones, saqueos y reclutamiento de niños soldado. En septiembre de 2005, el propio Nkunda fue acusado de crímenes de guerra por el Tribunal Penal Internacional.