MADRID, 22 Ene. (EUROPA PRESS) -
La ONG Intermón Oxfam expresó ayer su preocupación por la actual situación de los civiles en el Congo, que se encuentran totalmente desprotegidos para hacer frente a la violencia que podría derivar del nuevo giro del conflicto puede provocar, informó en un comunicado el portavoz de Intermón Oxfam, Francisco Yermo.
El ejército congoleño, las fuerzas militares de Ruanda y los rebeldes del Congreso Nacional para la Defensa del Pueblo (CNDP) se han alineado con el objetivo de iniciar el desarme de otro grupo rebelde, el de las Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda.
"El impacto que el conflicto puede tener en las 600.000 personas que viven en la zonas controladas por los rebeldes puede ser muy grave", destacó Yermo, quien explicó que el recrudecimiento del conflicto que tuvo lugar hace tres meses provocó el desplazamiento de 250.000 personas, numerosas muertes, violaciones y ataques por parte de todos los grupos armados.
Asimismo, manifestó que "este nuevo giro que está tomando la violencia en el Congo puede terminar provocando abusos similares y podría provocar el aumento de la cifra de desplazados en el país, que actualmente se sitúa en un millón de personas".
"La fuerza de paz que Naciones Unidas tiene desplegada en el Congo no es suficiente y todavía no ha llegado el refuerzo de 3.000 soldados que se comprometió a enviar hace unos meses.
La misión de la ONU en República Democrática del Congo (MONUC, por sus siglas en francés) no pudo proteger a los civiles en la escalada de violencia del año pasado y tampoco está claro que pueda hacerlo ahora si no cuenta con las tropas de refuerzo", aseguró el portavoz de la ONG, y agregó que los ciudadanos de la RDC llevan muchos años sufriendo y, desafortunadamente para ellos, la crisis humanitaria podría empeorar en breve.
