HOUSTON (TEXAS), 21 Abr. (Reuters/EP) -
La ex primera dama de Estados Unidos Barbara Bush ha sido recordada este sábado en su funeral por ser una figura formidable y cariñosa, por su ejemplo y por su estilo de "dictadura benevolente".
"Ella fue nuestra maestra y ejemplo de cómo vivir una vida con propósito y sentido", ha destacado Jeb Bush, uno de sus cuatro hijos, exgobernador de Florida y precandidato presidencial en 2016, ante la multitud reunida en una iglesia de Houston para despedir a Barbara Bush.
Luego Jeb Bush provocó sonrisas con una alusión a la famosa lengua mordaz de Bush: "Ella llamaba su estilo una dictadura benevolente pero, honestamente, no era tan benevolente".
Unas 1.500 personas, entre ellas gobernadores, senadores y expresidentes de Estados Unidos, participaron en un acto fúnebre televisado para rendir tributo a la matriarca de una de las dinastías políticas más prominentes del país, que murió el martes a los 92 años.
Bush, la esposa y madre de los presidentes 41º y 43º de la historia estadounidense, George H.W. Bush, y George W. Bush, respectivamente, fue recordada como una inspiración tanto para el país como para sus seres queridos, una mujer que imprimió una fuerte sensación de decencia y honor.
"Ella era sincera y tranquilizadora, firme y directa, honesta y amorosa", ha subrayado el historiador y escritor Jon Meacham, quien escribió una biografía de George H.W. Bush y fue uno de los tres oradores que Barbara Bush eligió personalmente antes de su muerte.
Los expresidentes de Estados Unidos Barack Obama y Bill Clinton, la actual primera dama, Melania Trump, la exsecretaria de Estado Hillary Clinton y la ex primera dama Michelle Obama asistieron al servicio religioso.
Sin embargo, el presidente, Donald Trump, quien se enfrentó con la familia Bush durante su campaña de 2016, no viajó a Houston. La Casa Blanca dijo esta semana que quería evitar alterar el servicio con seguridad adicional. En un tuit, el mandatario trasladó que sus "pensamientos y plegarias están con toda la familia Bush".
