RIAD, 31 Oct. (Reuters/EP) -
El príncipe Ahmed bin Abzulaziz, hermano pequeño del rey Salmán y crítico tanto con el monarca como con el príncipe heredero, Mohamed bin Salmán, ha regresado este miércoles al país árabe, según fuentes citadas por la agencia británica de noticias Reuters.
Bin Abzulaziz ha llegado a la capital, Riad, tras más de dos meses en el extranjero, en un momento en el que la Casa Real hace frente a una grave crisis a causa del asesinato del periodista Yamal Jashogi en el interior de su consulado en la ciudad turca de Estambul.
Fuentes diplomáticas árabes han resaltado que el príncipe ha pedido garantías de seguridad antes de iniciar su viaje, mientras que fuentes saudíes han indicado que parece ser que Riad las ha concedido.
"Creo que debe haber algún tipo de entendimiento previo. Ha habido mensajes en ambas direcciones y cuando las cosas se han solucionado ha decidido volver (a Arabia Saudí)", han dicho estas fuentes saudíes, cercanas a la Casa Real.
En septiembre, fue publicado un vídeo en el que rechazaba desde Londres las críticas de opositores saudíes a la Casa Real y apuntaba al rey y al príncipe heredero como responsables de la guerra en Yemen, lo que llevó al Gobierno a exigir explicaciones.
Bin Abdulaziz fue uno de los tres miembros del Consejo de la Lealtad, integrado por los principales miembros de la Casa Real, que se opusieron a apartar en 2017 a Mohamed bin Nayef como príncipe heredero en favor de Bin Salmán.
El príncipe heredero ha acudido al aeropuerto de Riad para recibir a Bin Abdulaziz, según fuentes, si bien la agencia estatal saudí de noticias, SPA, no ha publicado información ni fotografías sobre el viaje o la recepción.
Bin Salmán ha sido considerado el líder 'de facto' de Arabia Saudí debido a las escasas apariciones del monarca, si bien parece que el rey ha tomado un papel más activo en la política del país a raíz del asesinato de Jashogi.
El príncipe heredero, que es además ministro de Defensa, ha lanzado una campaña de reformas económicas y sociales en el país, pero sin embargo ha mantenido una línea dura con opositores y activistas.
Asimismo, ha encabezado una operación militar en Yemen contra los rebeldes huthis en apoyo al gobierno del presidente reconocido internacionalmente, Abdo Rabbu Mansur Hadi, que ha derivado en una grave crisis humanitaria.
