RABAT, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno marroquí ha mandado una carta al Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) en la que interpela a la comunidad internacional sobre la "represión sangrienta" que, en su opinión, están sufriendo las "poblaciones secuestradas" de los campamentos de Tinduf, en Argelia, e insta a abrir una investigación urgente sobre estas supuestas violaciones de Derechos Humanos.
En la misiva, escrita por el embajador de Marruecos en Ginebra, Mohamed Lulichki, se denuncian "las múltiples violaciones de los derechos fundamentales de la persona humana que sufren miles de civiles marroquíes que se encuentran en los campamentos, privados de la libertad de expresión y de circulación y víctimas de todas las exacciones, en violaciones del Derecho Internacional Humanitario".
Varias asociaciones defensoras de la pertenencia del Sáhara Occidental a Marruecos están denunciando abusos de las fuerzas de seguridad del Frente Polisario en Tinduf. Según la Asociación Saharaui para la defensa de los Derechos Humanos, los incidentes comenzaron el 27 de febrero a raíz de la brutal paliza y posterior detención por parte de la Policía del campamento del ciudadano saharaui Habadi Mohamed Lamin.
A raíz de ello, se registró una protesta pacífica solicitando su inmediata puesta en libertad y la detención de los policías implicados en tan brutal paliza. Esta manifestación fue dispersada "brutalmente" por una unidad de la Gendarmería del Polisario, con la posterior detención de una veintena de personas, entre ellas siete mujeres que participaron en la protesta, agregó la asociación.
Ayer, un centenar de personas, en su mayoría mujeres acompañadas de sus hijos, realizaron una sentada frente a la Secretaria General del Polisario para pedir la liberalización de todos los presos. La Gendarmería intervino inmediatamente con una "brutalidad sin precedentes" que se saldó con varias decenas de heridos.
Mientras, las autoridades argelinas procedieron a interrumpir todas las comunicaciones en la zona de Tinduf, y el Polisario decretó un toque de queda en todos los campamentos y estableció múltiples controles policiales, apostilló la organización.
