Sudán.- El desbordamiento de ríos y el desplome de casas por las fuertes lluvias causa 60 muertos y miles de desplazados

Actualizado: martes, 31 julio 2007 20:10

JARTUM, 31 Jul. (EP/AP) -

El desbordamiento de ríos y el desplome de casas debido a las fuertes lluvias que azotan Sudán han acabado con las vidas de más de 60 personas este mes, según explicó el general Awad Allah Widaa, mientras los residentes de la capital, Jartum, amontonaban bolsas llenas de arena en los embarcaderos del río Nilo para desviar el curso de las aguas.

Un total de "62 personas murieron como resultado de las inundaciones y las lluvias", indicó a la agencia AP el general, presidente de la Comisión de Emergencia para la Ayuda de los Efectos de las Inundaciones y las Lluvias, quien añadió que unas 145 personas han resultado heridas y decenas de miles de piezas de ganado se han perdido desde que comenzó este inusual aguacero el pasado junio,

Asimismo, afirmó que los hogares de más de 40.000 familias se han visto afectados sólo en el norte de Sudán, región prácticamente semidesierta y donde las casas son construidas con materiales de la zona, por lo que no resisten las fuertes lluvias.

Más de 23.000 casas hechas con ladrillo de adobe y situadas en el norte se han desplomado y al menos 140 edificios públicos, incluidos escuelas y hospitales, están seriamente dañados. Las principales carreteras de esta región han sido cortadas, añadió Widaa.

Además, las lluvias e inundaciones han provocado el desplazamiento de decenas de miles de personas en el sur de Sudán. Recientemente, las autoridades locales declararon esta región como zona de desastre.

Sin embargo, Widaa negó que se haya declarado el desastre natural en el sur, ya que señaló que "la situación está ahora bajo control y el presidente de la República (Omar Hassan al Bashir) ha emitido órdenes para que todos los recursos estén a nuestra disposición".

Las lluvias también han provocado riadas de lodo que han sepultado 10.000 viviendas en las afueras de la capital, en la zona donde convergen el Nilo Blanco y el Nilo Negro, dos afluentes del río más largo de África.

Por otro lado, las autoridades de Jartum están rociando con insecticidas las calles de la ciudad para prevenir el riesgo de enfermedades provocadas por los mosquitos y las moscas que las inundaciones han atraído.