Sudán.- El enviado de la ONU en Darfur pide a la comunidad internacional que reconsidere su estrategia en la región

Actualizado: sábado, 14 enero 2006 15:00

NUEVA YORK (ESTADOS UNIDOS), 14 Ene. (EUROPA PRESS) -

El representante especial de la ONU para Darfur, Jan Pronk, pidió a la comunidad internacional y a todas las partes implicadas que reconsiden la estrategia para alcanzar un acuerdo de paz en esta región de Sudán, donde la violencia ha dejado más de 180.000 muertos, además de haber provocado el desplazamiento de dos millones de personas.

Tras recordar que no se cumplió con el plazo del 31 de diciembre de 2005 para llegar a dicho entendimiento, pidió a los negociadores que se comprometan y lleguen a un consenso para evitar más sufrimientos a la gente que representan.

"Debemos admitir que nuestra estrategia de paz ha fallado hasta ahora. Todo lo que hemos hecho es recoger los pedazos y juntarlos, logrando muy poco y muy tarde", aseguró Pronk ante el Consejo de Seguridad de la organización.

En este sentido, afirmó que el primer factor será la implementación de un alto el fuego duradero respetado por la guerrilla, las milicias armadas janjawid y el Gobierno.

Esta condición hará posible continuar las negociaciones para una distribución justa e incluyente del poder, la riqueza, y los servicios básicos, añadió Pronk, tras sostener que la desigualdad es una de las principales causas del conflicto.

El diplomático indicó que los abusos y atrocidades siguen ocurriendo regularmente en Darfur y sostuvo que sólo una presencia internacional --como la que actualmente despliega la Unión Africana-- puede evitarlas en este momento.

Pero esta fuerza debe ser mucho más grande y poderosa para ser capaz de proteger a la población, defendió. Del mismo modo, la presencia internacional debe permanecer un periodo largo, al menos tres o cuatro años después de que se alcance un acuerdo de paz, para lograr la estabilidad e infundir confianza a los civiles, señaló. Con este planteamiento, Pronk urgió a la comunidad internacional a garantizar la financiación de la fuerza.