MADRID, 21 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los presidentes de Estados Unidos y Francia, Donald Trump y Emmanuel Macron, respectivamente, han acordado este miércoles "tomar medidas" para que Rusia "rinda cuentas" por el ataque con gas nervioso contra el exespía ruso Sergei Skripal y su hija en la localidad británica de Salisbury.
La Casa Blanca ha indicado en un breve comunicado que ambos mandatarios han mantenido una conversación telefónica en la que "han reiterado su solidaridad con Reino Unido tras el uso de armas químicas por parte de Rusia contra ciudadanos en territorio británico".
Previamente, el presidente francés había recalcado que el ataque "no puede quedar sin respuesta", según ha informado la agencia británica de noticias Reuters.
Skripal y su hija cayeron enfermos tras entrar en contacto con una sustancia tóxica el pasado 4 de marzo en Salisbury. Desde entonces están hospitalizados en estado grave.
La Policía cree que se trata de un intento de asesinato y el Gobierno de Theresa May ha expulsado a 23 diplomáticos rusos a modo de represalia. El Kremlin ha respondido con la misma medida en base al principio de reciprocidad.
Skripal fue condenado en Rusia por vender secretos a los servicios de Inteligencia de Reino Unido pero gracias a un acuerdo de canje de espías pactado entre Moscú y Washington fue liberado y recaló en el país europeo con asilo político.
