ÁMSTERDAM, 17 Ene. (Reuters/EP) -
Las autoridades de Turquía han informado de que han deportado a Ans Boersma, periodista del mayor diario económico de Países Bajos, 'Het Financieele Dagblad', al tiempo que han asegurado que han decidido expulsar a la reportera después de que la Policía holandesa les informara de que tenía vínculos con "una organización terrorista".
El diario ha defendido a su periodista y ha denunciado que su deportación representa "una flagrante violación de la libertad de prensa". "Ana ha hecho su trabajo de forma prudente y responsable. Es extraordinariamente triste que los periodistas en Turquía no puedan trabajar en paz", ha escrito el director del diario económico holandés, Jan Bonjer, en un mensaje publicado en su medio.
La Policía Nacional de Países Bajos no ha querido pronunciarse sobre este caso. Todas las autoridades holandesas consultadas por Reuters han rechazado hacer declaraciones y se han remitido a la Fiscalía holandesa.
Jeichen de Graaf, portavoz de la Fiscalía holandesa, ha confirmado que Boersma figura citada en una investigación en curso sobre actividades de milicianos aunque no se le considera implicada sino persona de interés, una figura previa a la imputación y que no conlleva que sea sospechosa de delito.
"No se cree que esté personalmente implicada en un delito terrorista" aunque sí que se le trata como persona de interés en el marco de la investigación, ha señalado De Graaf. Las autoridades pretenden investigar a la terrorista sobre su implicación mínima en el caso aunque no pedirán su arresto.
Por su parte, un portavoz de la Fiscalía holandesa ha contado al diario local 'Het Parool' que Países Bajos no ha solicitado que la informadora fuera expulsada o deportada.
En un primer momento, las autoridades turcas han dicho que la deportación de Boersma no está relacionada con su trabajo como periodista y luego han señalado que la detención ha tenido lugar por "supuestos vínculos con el terrorismo".
La Presidencia de Turquía ha señalado en un comunicado que las autoridades turcas recibieron información de la Inteligencia holandesa que señalaba que Boersma "tenía vínculos con la organización terrorista" y que habían solicitado "información sobre sus movimientos dentro y fuera de Turquía".
Boersma había acudido a una oficina de Inmigración en Estambul para ampliar su visado el miércoles cuando fue detenida, según ha contado su rotativo. "Y de repente estás sentada en el avión de vuelta a Países Bajos", ha afirmado Boersma este jueves en un mensaje publicado en su cuenta de la red social Twitter. "He sido declarada 'persona indeseable' en Turquía", ha explicado.
Las investigaciones relacionadas con terrorismo en Turquía suelen recurrir a supuestos vínculos con milicianos kurdos o con la organización que lidera el clérigo islamista turco afincado en Estados Unidos Fethulá Gulen, un antiguo aliado del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, al que el Gobierno acusa de haber impulsado el fallido golpe de Estado de julio de 2016.
Boersma, de 31 años, comenzó a trabajar como corresponsal en Turquía en 2017 y anteriormente ejerció como profesora de periodismo. Sus últimos artículos en el diario económico abordan temas como la inflación o el nuevo aeropuerto de Estambul, así como un análisis que señalaba que Erdogan estaba utilizando el asesinato del periodista saudí Yamal Jashogi para reforzar su posición en la escena internacional.
En su noticia sobre la deportación de la periodista, el diario económico holandés ha contado que la reportera ya tenía asegurada la renovación de su acreditación para 2019, por lo que ha sorprendido su expulsión.
Turquía, el país que tiene a más periodistas encarcelados, se sitúa en el puesto 157 de los 180 países analizados por Reporteros Sin Fronteras en el Índice Mundial de la Libertad de Prensa de 2018. Países Bajos y Turquía restablecieron recientemente relaciones diplomáticas tras un complicado 2017 en el que el Gobierno holandés impidió que líderes turcos hicieran campaña en territorio holandés para el referéndum constitucional.
