ANKARA, 28 Jul. (EP/AP) -
El Ejército turco anunció hoy que ha abierto una investigación sobre las declaraciones de un antiguo general en las que aseguró que varios soldados habían llevado a cabo bajo sus órdenes ataques con bomba atribuidos a los rebeldes del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).
Los atentados, cometidos cerca de viviendas de jueces y responsables políticos civiles, no causaron heridos. Al parecer, el objetivo era influir en las autoridades para endurecer los combates contra los rebeldes kurdos.
Las declaraciones del teniente general Altay Tokat fueron publicadas ayer por la revista 'Aktuel' y destacadas hoy por el diario 'Radikal'.
No es la primera vez que se acusa a soldados de cometer atentados posteriormente atribuidos a los rebeldes. El pasado mes de noviembre, dos policías colocaron una granada en una librería perteneciente a un antiguo rebelde, Seferi Yilmaz, en la localidad de Semdinli, cerca de la frontera con Irán. Yilmaz sobrevivió y pudo capturar a sus atacantes, quienes resultaron ser agentes suuestamente vinculados con altos mandos del Ejército.
