BRUSELAS, 27 May. (EUROPA PRESS) -
La Unión Europea ha anunciado una asistencia de 65 millones de euros para ayudar a Serbia y a Bosnia y Herzegovina a paliar los daños por las peores inundaciones en años que registran ambos países.
De la ayuda anunciada, tres millones de euros se desembolsarán como ayuda humanitaria a través de la Cruz Roja y la Media Luna y otras organizaciones para ayudar a cubrir las necesidades más inmediatas de las personas más vulnerables en ambos países, especialmente alimentarias y agua potable, servicios de salud y sanitarios, así como alojamientos y bienes de primera necesidad como mantas y colchones.
El resto de la ayuda, 62 millones, se movilizará para ayudar a responder a las necesidades de reconstrucción y de ayuda en las zonas afectadas a medio plazo, incluido para apoyar infraestructura como escuelas y servicios de atención social y equipamientos básico para que empresas y granjas puedan reanudar sus actividades. Se trata de fondos reasignados de ayudas a la preadhesión y el dinero estará disponible a partir de finales de junio, según ha precisado la Comisión Europea en un comunicado.
Al margen de estos fondos, el Ejecutivo comunitario destinará otros dos millones de euros para módulos de respuesta a inundaciones a través de convocatorias que hará públicas en junio con fondos de ayuda a la preadhesión del programa de 2013 y destinará "dinero fresco" de ayudas a la preadhesión a medio y largo plazo entre 2014 y 2020 aunque la cantidad exacta se decidirá "en base a evaluaciones de necesidades completas, que se esperan en las próximas semanas", de modo que los fondos puedan estar disponibles "a lo largo del verano".
En coordinación con las instituciones financieras internacionales, la Unión Europea movilizará más fondos de ayuda a la preadhesión para apoyar la reconstrucción de infraestructuras y mejorar la gestión del riesgo de inundaciones a nivel regional.
La UE ya está prestando apoyo para realizar la evaluación de necesidades a través del Instrumento para la Estabilidad y la Paz, del que también saldrá más financiación para atajar el problema "crítico" de las minas en Bosnia y Herzegovina, que data de la época de la Guerra de los Balcanes de los años 90 y que se ha agravado por los deslizamientos de tierra, que han desplazado muchas de ellas o las han aflorado, con el consiguiente riesgo para la población. La misión europea Althea está prestando apoyo a las autoridades bosnias para evaluar el impacto de los deslizamientos en las minas.
Un total de 22 Estados miembros, incluida España, han ofrecido ayuda en especie -dos helicópteros, equipos de dragados, cerca de 40 lanchas de rescate y 15 equipos de purificación de agua entre otros-- a través el Mecanismo de Protección Civil de la UE, que coordina la ayuda de los Estados miembros para responder a desastres naturales y que fue activo a petición de los Gobiernos de Belgrado y Sarajevo.
En el caso España, el Gobierno anunció ayer que enviará un equipo de apoyo con medios logísticos y humanos a las zonas de los Balcanes afectadas por las inundaciones, compuesto por cuatro bombas de agua de alta capacidad, un convoy de 15 vehículos, con 37 miembros de la Unidad Militar de Emergencias, junto a un equipo de búsqueda y rescate y 3 expertos de Protección Civil.
Más de 660 expertos en protección civil europeos han sido desplegados en ambos países y han podido rescatar a 1.500 personas sólo en Bosnia.
La UE también ha desplegado dos equipos propios para ayudar a coordinar la ayuda sobre el terreno. La Comisión también está confinanciando el transporte de la ayuda y ofreciendo imágenes por satélite de las zonas inundadas a las autoridades de ambos países.
