BRUSELAS, 11 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Parlamento Europeo, Josep Borrell, preguntará durante la cumbre del 15 y del 16 de junio a los jefes de Estado y de Gobierno de los Veinticinco si quieren suprimir la sede de la Eurocámara en Estrasburgo, en plena polémica por el sobrealquiler que cobraba el Ayuntamiento de la ciudad francesa por dos edificios.
La decisión se adoptó hoy en la conferencia de presidentes de los distintos grupos parlamentarios con el respaldo de la práctica totalidad de las fuerzas políticas. La iniciativa partió del presidente de los socialistas, Martin Schulz, que destaca que la existencia de dos sedes --Estrasburgo y Bruselas-- conlleva "dificultades prácticas en la organización del trabajo del Parlamento y en el ejercicio de sus competencias".
Los grupos políticos acordaron por tanto que, en su tradicional intervención al inicio de todas las cumbres, Borrell interpele a los líderes europeos para que digan claramente si quieren mantener el statu quo por lo que se refiere a las sedes de la Eurocámara o planean introducir algún cambio.
Lo que pretenden los parlamentarios no es tanto conseguir que se cierre Estrasburgo sino dejar claro ante la opinión pública que la existencia de varias sedes --la Secretaría de la institución se encuentra además en Luxemburgo-- no es culpa de la Eurocámara sino de los jefes de Estado y de Gobierno, que la han inscrito en los Tratados, subrayaron las fuentes. El propio Parlamento calcula que los viajes mensuales a Estrasburgo para celebrar los plenos cuestan unos 200 millones de euros al año.
Paralelamente, un grupo de parlamentarios ha lanzado una iniciativa popular para recoger un millón de firmas de ciudadanos comunitarios que apoyen la supresión de la sede de la Eurocámara en Estrasburgo.
Los parlamentarios, que forman parte del grupo 'Campaña para la Reforma del Parlamento', creen que el "circo" de los traslados mensuales a Estrasburgo "no es eficiente y cuesta mucho dinero", según dijo una de las promotoras de la iniciativa, la liberal sueca Cecilia Malmström.
El objetivo es lograr el millón de firmas antes de final de año. Se puede participar en la dirección electrónica www.oneseat.eu La Constitución Europea preveía la iniciativa legislativa popular con un millón de firmas.
Los eurodiputados quieren presentar esta cantidad a la vicepresidenta del Ejecutivo comunitario, Margot Wallström, que ha abogado por mantener la idea de la iniciativa popular pese a que no se haya ratificado la Carta Magna.
