UE.- Los europarlamentarios, "muy impresionados" al comprobar las obras de la M-30 desde lo alto de un edificio

Actualizado: lunes, 26 junio 2006 21:04

Una vecina denuncia el "tremendo" ruido las 24 horas del día y exige a Gallardón que cese los trabajos de noche para poder dormir

MADRID, 26 Jun. (EUROPA PRESS) -

Los eurodiputados Proinsias de Rossa (Partido Socialista Irlandés) y Margrete Auken (Los Verdes de Dinamarca) se mostraron hoy "muy impresionados" por el "importante" volumen de las obras de la M-30 en el entorno del río Manzanares, que pudieron contemplar al visitar un tramo cercano al Paseo de la Virgen del Puerto y principalmente desde la planta 17 del edificio ubicado en el número 67 de la calle de Antonio López.

Para De Rossa y Auken "está muy claro" la elevada magnitud del proyecto y por ello señalaron que su primera impresión es que necesitaría de una declaración de impacto medioambiental previa. No obstante, insistieron en que están en una fase de estudio en la que reciben información de todas las partes implicadas en las obras.

"No somos ni abogados ni expertos pero por mi experiencia en Irlanda y después de la documentación que se nos ha entregado y de visitar algunas partes de los trabajos si creemos que es evidente que se deberían haber seguido todos los carriles necesarios para realizar un estudio ambiental", precisó el europarlamentario irlandés.

"TREMENDO RUIDO"

Ambos hicieron estas declaraciones después de contemplar las obras desde la terraza de una vivienda situada en la planta 17 del edificio número 67 de la calle de Antonio López, propiedad de Paula Fernández, quien se quejó del "tremendo ruido" que generan las máquinas durante las 24 horas del día y el consiguiente trastorno para su salud, principalmente en las horas de descanso.

Paula, de 60 años, lleva 32 viviendo en esta casa y sólo durante el último año ha necesitado pastillas para poder dormir. "Se vive muy mal y por eso aunque todo quede muy bonito, como anuncia el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, nunca se lo voy a agradecer porque me ha hecho mucho daño",subrayó.

Además, insistió en que le da igual que los trabajos --con los cuales no está de acuerdo pero respeta-- duren uno o cuatro años, y lo único que exigió es que "se paren por las noches y así pueda uno dormir". "Es tan desesperante que incluso no puedo sacar a mi perra a pasear. Todo ello sin contar la constante contaminación que sufrimos por el polvo", dijo.

También mostró su preocupación por la cercanía de los túneles con los edificios, así como por las ratas que vecinos han visto en la piscina y en el patio central, circunstancia que achacó a los continuos cambios en el cauce del río. Finalmente, y preguntada por la futura "alfombra verde" que le quedará delante de su casa, manifestó que "no le importa en absoluto".

"Ahora no veré coches circular por delante de mi vivienda pero prefería verlos pasando entre los árboles que había antes de que los talasen. Además tendré que seguir respirando el aire que dejan dichos vehículos en los túneles porque nos han puesto una salida de humos delante del edificio", concluyó.

Previamente los dos eurodiputados realizaron una visita a un tramo en construcción cercano al Paseo de la Virgen del Puerto, donde recibieron explicaciones del director general de Infraestructuras, Manuel Arnáiz. No pudieron acudir a otros puntos fijados por los peticionarios, como el Puente de Toledo o el by-pass sur debido a la reunión prevista para las cinco y media de la tarde con la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona.