BRUSELAS, 15 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Parlamento Europeo pidió hoy a los Veinticinco más medidas para combatir la pobreza y la exclusión social fomentando la formación, impulsando la creación de empleo, la progresión profesional y la conciliación entre la vida profesional y familiar. El objetivo es reducir en un 15% el número de personas que vivía en 2002 al borde de la pobreza en la UE.
En un informe, los eurodiputados destacan que la mejor forma de luchar contra el desempleo es subsanar las deficiencias en materia de educación y mejorar las capacidades de los trabajadores, independientemente de su edad, la minoría étnica o nacional a la que pertenezcan, y que sean hombres o mujeres.
Además los parlamentarios subrayaron la necesidad de garantizar en Europa el derecho a la asistencia sanitaria y a una vivienda digna en igualdad de condiciones, y a unos regímenes de protección social sostenibles.
El Parlamento advirtió que las personas que corren el mayor riesgo de quedar sumidas en la pobreza y la exclusión social son los trabajadores ocasionales, los desempleados, las familias monoparentales (en la mayoría de los casos, bajo la responsabilidad de mujeres), las personas mayores que viven solas, las mujeres y las familias con varias personas a su cargo.
Asimismo también se puede incluir en ese colectivo de riesgo a las minorías étnicas, los niños desfavorecidos, las personas enfermas o discapacitadas, las personas sin hogar, las víctimas de tráfico de personas, y las personas dependientes de las drogas o el alcohol.
La Eurocámara solicitó a los Estados miembros que dediquen más recursos de los fondos estructurales y en especial del fondo social europeo a solventar el problema de la pobreza infantil, y que presten más apoyo a los servicios sociales de atención y cuidado de niños.
Además, pidió a la Comisión Europea que presente un Libro Verde sobre la pobreza infantil, y que acelere los trabajos para la creación de una "Carta del niño", para poder así progresar en la defensa de los derechos del niño en el marco de la política interior y exterior de la UE.
En cuanto a los jóvenes, la Cámara reclamó a los Estados miembros que intercambien las mejores prácticas para conseguir que éstos no abandonen su formación prematuramente, sino que mejoren sus niveles de conocimiento, en especial en idiomas y nuevas tecnologías, facilitándoles después el paso de la escuela al trabajo.
Además, los diputados añadieron que le corresponde al Estado desempeñar una función fundamental en cuanto a garantizar una escuela pública de calidad.
Sobre la situación de la mujer, los diputados subrayaron que es necesario ampliar su participación en el mundo laboral a través de la igualdad salarial respecto de los hombres, y fomentar su acceso a puestos de trabajo de calidad.
Además, señalaron que la incorporación al trabajo de las mujeres es una protección necesaria ante el riesgo de pobreza y una manera de preservar el equilibrio entre la tasa de activos e inactivos, 'amenazado' por el envejecimiento de la población. Asimismo el Parlamento reiteró su apoyo a la iniciativa de la Comisión Europea de declarar el 2007 "Año europeo de la igualdad de oportunidades para todos".
En el año 2002 más de 68 millones de personas, el 15 por ciento de la población de la Unión Europea, estaban expuestos a la pobreza, con una renta inferior al 60 por ciento de la media nacional respectiva. Los desempleados, las personas sin hogar y las mujeres (madres solteras o personas solas de cierta edad) suelen ser las más desfavorecidas.
