UE pide más esfuerzos a la fuerza conjunta del Sahel para atajar la creciente amenaza terrorista

Soldados de Francia en República Centroafricana
STRINGER . / REUTERS - Archivo
Publicado: lunes, 13 mayo 2019 21:16

BRUSELAS, 13 May. (EUROPA PRESS) -

Los ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea han expresado su seria preocupación por "la expansión de la amenaza terrorista, de la violencia extrema y el crimen organizado, incluido el tráfico humano" en el Sahel y han dejado claro que la fuerza conjunta de 5.000 efectivos creada por Níger, Malí, Burkina Faso, Mauritania y Chad tiene que intensificar sus esfuerzos.

"La UE celebra la reanudación de las operaciones de la fuerza conjunta G5 Sahel y pide que sus esfuerzos se intensifiquen", reza el texto de conclusiones aprobado por los Veintiocho sobre el Sahel, que constituye "una prioridad estratégica" del bloque y cuyos desafíos de seguridad abordarán este martes los ministros de Exteriores y Defensa de la UE y de los cinco países que aportan a la fuerza conjunta.

Los Veintiocho aseguran que la Unión "continuará implementando" los 147 millones de euros ya comprometidos para apoyar su fuerza militar conjunta, pero piden a los países del Sahel que "redoblen, aceleren y profundicen" su cooperación regional y movilicen más recursos para garantizar la "plena" operatividad de su fuerza conjunta y que el secretariado permanente pueda cumplir sus tareas y ven necesario establecer un pilar "policial" para completarla.

Los 28 ya acordaron en febrero reforzar su célula de expertos en apoyo de la fuerza conjunta del Sahel para extender a Burkina Faso, Chad y Mauritania las tareas de formación que venían brindando a las fuerzas de Malí y Níger y que la misión de entrenamiento del Ejército maliense pudiera ofrecerla "fuera de su zona", analizado "cada caso".

Francia quiere que EUTM Malí se despliegue en el centro del país ante el deterioro en esta zona, aunque deja claro que se trata de hacer formación y no "acompañar en combate" a las fuerzas malienses.

Los jefes de la diplomacia europea han pedido a los países más esfuerzos para atajar el deterioro de seguridad y dar prioridad a las zonas de inestabilidad "más críticas" tras expresar especial preocupación "por el aumento de la violencia terrorista y entre comunidades en Malí y en Burkina Faso, así como por el aumento de la presión migratoria y el empeoramiento de la situación humanitaria.

En particular, han instado a los Gobiernos de la región a "desmantelar y desarmar a todas las milicias activas en su territorio y a lanzar un proceso de diálogo y reconciliación ambicioso e inclusivo en las regiones afectadas para resolver los problemas de cohesión social y confianza, en particular entre la población y las Fuerzas Armadas", insistiendo en que no deben dejar "espacio para la impunidad" y deben investigar los casos de violencia sexual e impedir el reclutamiento de niños soldado.

En el caso de Malí, instan al nuevo Gobierno a concluir rápidamente la aplicación del acuerdo de paz sellado en 2015, especialmente para desmantelar y reintegrar a las milicias, acometer la descentralización y procurar el desarrollo de las regiones del norte, de mayoría tuareg, y han subrayado el papel "determinante" de la misión de la ONU, la MINUSMA, para apoyar la vuelta del Estado en el norte y centro del país.

Los Veintiocho, que movilizarán más de 8.000 millones de euros en ayuda al desarrollo para la región de aquí al 2020, también piden a los países del Sahel que impulsen "grandes reformas" para promover la gobernanza "inclusiva", "una descentralización genuina", "restablecer los servicios públicos" y "combatir la corrupción" y dejan claro que tienen la responsabilidad "principal" de resolver los problemas de terrorismo, gobernanza, Estados de Derecho, y para combatir la pobreza endémica.