BRUSELAS, 11 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Partido Popular Europeo (PPE) pidió hoy a la Eurocámara y a los Veinticinco que aprueben lo antes posible la polémica directiva de liberalización del sector servicios ya que, a su juicio, se trata de una iniciativa "crucial" para impulsar el crecimiento de la economía europea.
"La apertura del vasto mercado de servicios de la UE, y la eliminación de las barreras administrativas innecesarias constituyen un factor importante en la conclusión del mercado único, y una medida crucial para lograr una economía europea fuerte y que cree puestos de trabajo a largo plazo", destacó el PPE en una declaración aprobada por su buró político, máximo órgano entre congresos.
Los populares expresaron su respaldo a las enmiendas a la directiva de servicios aprobadas por la comisión de Mercado Interior del Parlamento Europeo porque "consagran la libertad de suministrar servicios transfronterizos, al tiempo que garantizan que las autoridades públicas puedan continuar salvaguardando los intereses legítimos de sus trabajadores, particularmente en las áreas de salud, seguridad y el medio ambiente y el trabajo".
Con estas enmiendas, la directiva se podrá aplicar "sin menoscabo de la legislación laboral y de seguridad social", según el PPE. Además, el partido conservador defendió que se incluyan en el ámbito de la norma los servicos públicos abiertos a la competencia. "Se trata de un área económica muy amplia en la que las empresas innovadoras, especialmente las Pymes, deberían disfrutar de la libertad que la directiva proporciona", afirma la resolución.
La Eurocámara votará la directiva de servicios en su pleno del mes de febrero. Por su parte, el canciller austriaco Wolfgang Schüssel anunció el pasado lunes que trabajará para que los Veinticinco aprueben el texto antes de que finalice su presidencia, en junio de 2006.
La directiva de servicios fue uno de los factores que contribuyó al triunfo del 'no' en el referéndum de Francia sobre el Tratado constitucional. Sus detractores afirman que su aprobación fomentará el 'dumping social' y el empeoramiento de las condiciones laborales de los trabajadores.
