UE/Turquía.- Bruselas se pronunciará mañana sobre los obstáculos que lastran el camino europeo de Turquía

Actualizado: martes, 7 noviembre 2006 21:28

Merkel pide a Ankara cumplir sus promesas para evitar una crisis

BRUSELAS, 7 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Comisión Europea dará a conocer mañana el esperado informe sobre los progresos de Turquía en su camino hacia el club comunitario y es más que probable que el veredicto sea "muy negativo", critique los escasos avances del país candidato en materia de Derechos Humanos, el respeto a la libertad de expresión, la erradicación de la tortura o lograr un mayor control sobre las actividades del Ejército.

Además, la persistente negativa de abrir el comercio a Chipre, inclumpliendo así el llamado 'Protocolo de Ankara' que obliga al país candidato a extender los acuerdos aduaneros a todos los miembros de la Unión Europea, figurará sin duda en el documento elaborado por el comisario europeo responsable de Ampliación, el finlandés Olli Rehn.

La ralentización de las reformas y la negativa de Ankara a reconocer a Chipre no sólo lastran el camino europeo de Turquía sino que podría incluso bloquear la ya de por sí lenta negociación de adhesión, lanzada hace un año y en la que hasta el momento se han cerrado tan solo dos de los treinta y cinco capítulos que el candidato debe superar.

Hoy mismo, la canciller alemana, Angela Merkel, cuyo país ejercerá la presidencia de turno de la UE a partir de enero, y el primer ministro de Finlandia, actual presidente en ejercicio del Consejo, Matti Vanhanen, subrayaron la necesidad de que Turquía cumpla sus promesas y se mostraron convencidos de que lograrán una solución a finales de año.

"Queremos una solución, no deseamos que aumente el conflicto", dijo Angela Merkel en un encuentro con Vanhanen en Berlín. La canciller alemana exigió a Turquía que ceda en la cuestión de Chipre y respete el Protocolo de Ankara, como prometió antes de que comenzaran las negociaciones de adhesión a la UE.

Aunque se ha especulado con la posibilidad de que Bruselas haga una recomendación a los Estados miembros sobre si deben o no continuar las negociaciones, fuentes comunitarias descartan que el informe de mañana sea especialmente "dramático".

Las mismas fuentes recuerdan, por otra parte, que las reiteradas referencias a los efectos que tendría la negativa de Ankara a reconocer a Chipre figuran ya de manera explícita en la declaración sellada en septiembre de 2005 en la que se dice que "de no cumplir Turquía plenamente sus obligaciones, ello afectará a la marcha general de las negociaciones". Corresponde ahora a los Veinticinco pronunciarse sobre el alcance de tales consecuencias.

Vanhanen, por su parte, mostró plena confianza en que "si la política actúa conjuntamente y quiere, hasta finales de este año, Finlandia, como Presidente del Consejo, todavía tiene tiempo de alcanzar una solución" para que Turquía abra finalmente sus puertos y aeropuertos a Chipre.

Por su lado, el primer ministro italiano, Romano Prodi, que también se encontraba hoy en Berlín participando en un congreso del partido Socialdemócrata Europeo (SPE) que tiene lugar desde ayer en la capital germana, señaló también su interés en que se aclare finalmente el conflicto de Turquía y Chipre. "Tenemos que seguir adelante con las negociaciones. Será un proceso largo, pero merecerá la pena", dijo Prodi en Berlín. Mientras, el comisario de Ampliación, Olli Rehn, admitía la semana pasada que Turquía tiene que relanzar el proceso de reformas con total determinación, pero también lamenta que ninguno de los dos lados del Bósforo ha dado a la crisis la atención que merece.

"La Unión Europea es muy importante en Turquía tanto para anclar el desarrollo democrático como para dirigir el crecimiento económico. Pero hay cierta tendencia en Europa a subestimar la importancia estratégica de Turquía como puente entre civilizaciones", se lamentaba Rehn.

También el Parlamento Europeo aprobó el pasado 27 de septiembre un duro informe en el que criticaba la ralentización del proceso de reformas en Turquía, reclamaba una normalización de las relaciones con Chipre y con Armenia y alertaba de las restricciones a la libertad de expresión.

La Eurocámara veía "insuficiencias persistentes" o "progresos insatisfactorios" en ámbitos como la libertad de expresión, la religión, los derechos de las minorías y de las mujeres, las relaciones entre civiles o los derechos sindicales y culturales. Los eurodiputados pedían al Gobierno de Ankara relanzar las reformas si quiere entrar en la UE.

Una vez conocido el informe de la Comisión Europea, serán los jefes de Estado y de Gobierno los que se pronuncien sobre el camino europeo de Ankara en la cumbre que se celebrará en diciembre.