MADRID, 19 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Misión de Asistencia de Naciones Unidas en Afganistán (UNAMA) y el Consejo de Seguridad han condenado este martes el atentado suicida perpetrado durante la jornada en la localidad de Maimana, la capital de la provincia de Faryab (norte), que se ha saldado con al menos 17 muertos y 48 heridos.
El jefe de la Policía provincial, Toryalai Abdyani, ha detallado que el terrorista suicida iba a bordo de un 'rickshaw' --vehículo ligero de dos ruedas-- y que intentó forzar su entrada en el Banco de Kabul, haciendo estallar sus explosivos en medio de un bazar tras no conseguirlo.
Por el momento ningún grupo ha reclamado la autoría del ataque, si bien las autoridades suelen achacar este tipo de atentados a los talibán.
El representante adjunto de la ONU en el país, Nicholas Haysom, ha descrito como "trágico" el aumento continuo del número de víctimas civiles a causa de artefactos explosivos. "Su uso en lugares públicos como mercados es atroz e injustificable", ha dicho.
En este sentido, la UNAMA ha recalcado que la utilización de este tipo de explosivos puede constituir un crimen de guerra y que el Derecho Humanitario prohíbe tanto ese tipo de armas como los ataques que no distinguen a los civiles de los objetivos militares.
Por su parte, el Consejo de Seguridad ha condenado "enérgicamente" el atentado y ha expresado sus condolencias a las familias de las víctimas. Asimismo, ha expresado su preocupación por la amenaza que suponen los talibán y la organización terrorista Al Qaeda para la población, las fuerzas de seguridad y las tropas internacionales presentes en el país.
El organismo ha resaltado que el terrorismo en todas sus formas y manifestaciones es "injustificable", independientemente de su motivación, quién lo cometa o dónde tenga lugar.
Por último, ha subrayado que "ningún acto de terrorismo puede revertir el camino hacia la paz, la democracia y la estabilidad en Afganistán, que cuenta con el apoyo del pueblo y el Gobierno de ese país y de la comunidad internacional".
