BUCAREST, 3 Abr. (EUROPA PRESS/Borja Diaz-Merry) -
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, abandonó esta tarde la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la OTAN en Bucarest para regresar a España antes de la conclusión de una de las jornadas centrales del cónclave, la dedicada a la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad en Afganistán (ISAF), tras haber mantenido reuniones con el presidente polaco, Lech Kaczinsky, y el nuevo primer ministro australiano, Kevin Rudd.
Según informó el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación español en rueda de prensa en el Palacio del Parlamento de la capital rumana, el presidente español no mantuvo ninguna reunión con Bush porque no estaba previsto y dijo que no tenía "constancia" de que se hubiera producido encuentro alguno entre ambos, aparte del saludo que se intercambiaron ayer noche en la cena en el Palacio de Cotroceni. El jefe del Ejecutivo español manifestó este mediodía que "seguramente" se vería con el presidente norteamericano porque quedaba por delante "mucha cumbre".
Moratinos indicó que Zapatero durante su permanencia en la reunión de Bucarest ha mantenido "conversaciones" con el presidente de Afganistán, Hamid Karzai, la primera ministra neozelandesa, Hellen Clark, el 'premier' portugués, Jose Socrates, el primer ministro británico, Gordon Brown, la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Nicolas Sarkozy.
Preguntado por el contenido de las dos únicas reuniones mantenidas por Zapatero, señaló que el presidente dialogó con su homólogo polaco, Lech Kaczinsky sobre diversas cuestiones, como la próxima cumbre hispano-polaca que se celebrará en España o la situación de Georgia y Ucrania antes de que se decidiera si se les ofrecía el Plan de Acción para la Adhesión.
Moratinos señaló que Zapatero mantuvo con el nuevo primer ministro australiano su primera reunión y destacó sobre Kevin Rudd su ideología socialdemócrata, circunstancia que daba mayor interés al encuentro, en el que trataron temas bilaterales, incluidos el contrato con la naviera militar española Navantia para construir dos portaaernoaves y tres fragatas para la Marina Real Australiana.
UN APRETÓN DE MANOS FRENTE A BUSH
Tras la rueda de prensa posterior al Consejo Atlántico, Zapatero protagonizó un curioso e interesante episodio durante la foto con todos los mandatarios internacionales reunidos en la cumbre de Bucarest y reflejado por el circuito interno de televisión de la cumbre, cuya señal distribuye la OTAN. Situado en la foto de familia posterior a la reunión junto al presidente turco, Abdulá Gul, al concluir el posado, el presidente español se aproximó rápidamente al grupo integrado por el 'premier' británico y el presidente Bush, que conversaban mientras salían del salón. Desde el lado izquierdo de Brown, Zapatero se cruzó brevemente para estrechar su mano con uno de los mandatarios del grupo, si bien las imágenes de televisión no permitieron observar si el 'saludado' con un apretón de manos fue Bush o el mandatario situado inmediatamente a su derecha.
Fuentes de la delegación española consultadas por Europa Press informaron de que no hubo en ese momento apretón de manos entre el jefe del Ejecutivo español y el presidente estadounidense, por lo que Zapatero realizó su saludo al otro mandatario cruzándose de frente con Bush mientras el grupo continuaba caminando por el Salón. Mientras Zapatero se encontraba con el grupo de Brown y Bush, el titular de Asuntos Exteriores se hallaba sentado en uno de los laterales de la mesa del Consejo Atlántico Norte conversando con la secretaria de Estado estadounidense, Condolezza Rice, y con otros mandatarios. Las imágenes del circuito cerrado no permitieron ver durante cuánto tiempo mantuvieron su reunión informal.
EEUU Y AFGANISTÁN NO PIDEN TROPAS A ESPAÑA
Por otro lado, al ser consultado sobre si Estados Unidos le había solicitado a España que aumente sus tropas en Afganistán, el jefe de la Diplomacia española aseguró que su homóloga no le trasladó ni ayer ni hoy una petición en ese sentido y recalcó que el Gobierno realiza una contribución destacada tanto en materia militar como en el plano de la reconstrucción. Aseguró, además, que España ocupa el décimo país como contribuyente militar y que también está a la cabeza como donante económico y por su aportación en desarrollo y reconstrucción.
"Creo que todos tenemos que estar satisfechos y orgullosos del papel y de la responsabilidad que está asumiendo nuestro país, que está asumiendo la sociedad española y espero que ese mensaje se comprenda a nivel global: la contribución al futuro de Afganistán pasa no solamente por una contribución militar sino por la combinación de esfuerzo militar, esfuerzo político, esfuerzo de reconstrucción, y en todos los esfuerzos España está a la vanguardia del esfuerzo de la comunidad internacional", aseguró.
Moratinos explicó que el presidente Karzai manifestó personalmente a Zapatero antes de la reunión con la OTAN su agradecimiento por la contribución a Afganistán, al tiempo que subrayó que España está "muy presente y muy comprometida" con el futuro del país centroasiático.
Tras negar que Karzai le hubiera solicitado a España más efectivos y medios, Moratinos hizo especial hincapié en la importancia del nombramiento del nuevo enviado especial de Naciones Unidas en Afganistán, Kai Eide, como figura coordinadora del esfuerzo de cooperación y desarrollo y como "imagen" de la ONU en el país centroasiático. Subrayó, en esa misma línea, que el esfuerzo político y civil ha pasado ahora a un primer plano tras la cumbre de Bucarest, en paralelo al necesario esfuerzo militar.
