Zimbabue.- Las mujeres de Zimbabue tienen serias dificultades para conseguir el tratamiento contra el sida

Actualizado: martes, 15 enero 2008 21:08

MADRID, 15 Ene. (EUROPA PRESS) -

Las mujeres de las zonas rurales en Zimbabue tienen cada vez más difícil el acceso a tratamientos antiretrovirales para combatir el sida y tienden a estar cada vez más marginadas que aquellas que viven en zonas urbanas, según informó la agencia de noticias de la ONU, IRIN.

"Las mujeres de áreas rurales que necesitan tratamientos antiretrovirales se encuentran en un dilema porque los niveles de ingresos de los hogares son bajos", afirmó el coordinador provincial de la Red de Zimbabue contra el Sida (ZAN, por sus siglas en inglés), Tariro Kutadza, en la provincia septentrional de Mashonaland Oeste.

De acuerdo con los estudios llevados a cabo por la Red Central de Recursos de la Mujer de Zimbabue, tres cuartos de las mujeres que reciben tratamiento contra el sida provienen de zonas urbanas. Sin embargo la mayoría de las que lo necesitan viven en zonas rurales y se ven obligadas a depender de los remedios herbales.

En el octavo año de recesión económica en el país y con una altísima tasa de inflación, los tratamientos antiretrovirales son inasequibles para las mujeres de áreas rurales, quienes normalmente dependen de sus maridos que trabajan en zonas urbanas.

Esta semana, el periódico zimbabuense 'Herald' informó de que el coste mensual de Stalenevev 30, uno de los antiretrovirales más comunes, asciende a 85 millones de dólares zimbabuenses (casi 3.000 euros). Kutadza, que trabaja principalmente en zonas rurales, dijo que la carga financiera para las mujeres de zonas rurales va más allá del alto coste de los medicamentos porque además tienen que viajar largas distancias hasta los centros de salud para conseguirlos.

Existe una gran diferencia entre el número de personas que necesitan los medicamentos y aquellas que pueden acceder a los mismos. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), sólo 91.000 personas de las 321.000 afectadas por el virus están siguendo tratamiento.

La escasez de divisa extranjera hace difícil para el Gobierno y para las farmacias privadas importar la cantidad necesaria de antiretrovirales para satisfacer la demanda. Según informó el diario 'Herald', los medicamentos más esenciales sólo se encuentran en una de cada cuatro farmacias.

MÁS PROBLEMAS PARA LAS MUJERES

Incluso las pocas mujeres de zonas rurales que pueden permitirse tomar la medicación, encuentran dificultades para hacerlo. "He notado que algunos hombres, particularmente aquellos que piensan que no están infectados, animan a sus mujeres a no tomar los medicamentos", aseguró Kutadza a IRIN.

La presidenta de Rayo de Esperanza --una organización que promueve la rehabilitación de mujeres maltratadas--, Betty Makoni, informó de que muchas mujeres esconden las medicinas para que sus maridos no las vean. "Por consiguiente, las mujeres toman los medicamentos cuando los maridos van a por agua o leña y en algunos casos dejan los medicamentos bajo la custodia de otras mujeres", aseguró Makoni.

En las zonas rurales personas todavía ven el sida como una enfermedad sin cura. Los hombres y sus familiares suelen considerar a las mujeres infectadas como una carga vergonzosa y las echan de casa. Kutadza señaló que al verse forzadas a vivir en otros lugares, las mujeres que ya están registradas en su centro de salud local encuentran serias dificultades para conseguir los medicamentos.

El miedo al estigma y la discriminación hace que la población infectada no solicite asesoramiento psicológico ni tratamiento médico y algunos enfermos alegan haber sido hechizados, informó Kutadza.

Makoni dijo que a pesar de que suelen ser los hombres los que contraen la enfermedad mientras trabajan en la ciudad y luego contagian a sus mujeres durante sus visitas, los parientes y vecinos a menudo acusan a las mujeres de ser ellas las fuentes de infección.