La Asociación de Viticultores y Bodegueros de Canarias nace para defender "con uñas y dientes" los intereses del sector

Actualizado: sábado, 17 mayo 2008 11:36

SANTA CRUZ DE TENERIFE, 17 May. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la Comisión de Agroindustria de la Cámara de Comercio, Industria y Navegación de Santa Cruz de Tenerife, Juan Jesús Méndez Siverio, en la presentación oficial de la Asociación de Viticultores y Bodegueros de Canarias (AVIBO) como primera organización empresarial de carácter regional sentenció que esta entidad nace para defender "con uñas y dientes los intereses del sector en todas cada una de las Islas".

"El sector vitivinícola del Archipiélago se encuentra en una situación límite. Es más, si el Gobierno de Canarias no adopta medidas urgentes, en tres meses la crisis asfixiará al sector. Muchas bodegas cerrarán sus puertas y la economía de miles de familias se vendrá abajo", subrayó.

Junto a Juan Jesús Siverio Méndez, que es también presidente de AVIBO, en la presentación estuvieron los representantes de las bodegas más importantes de las Islas como Jesús Corvo (Valle de La Orotava), Antonio Carballo (La Palma), Manuel Marrero (Abona), Javier Gómez (Valle de Güimar), Leonardo Ruíz (Tacoronte-Acentejo), y Hugo Luengo (Abona).

Según explicó Méndez Siverio, la asociación AVIBO se ha puesto en marcha "para dar una sola voz a un sector del que forman parte más de 11.000 viticultores, que está siendo completamente olvidado por el Gobierno de Canarias, a pesar de que ocupa la mayor superficie de cultivo del Archipiélago con 18.000 hectáreas, y es el tercero más importante en valor de producción".

Tanto desde AVIBO, como desde la Comisión de Agroindustria de la Cámara, se ha mostrado el total descontento con la reciente visita del Gobierno de Canarias a Bruselas para abordar la situación de las RUP, un encuentro en el que se contó con la presencia de representantes de los tomateros, plataneros y productores de flores y se obvió al sector vitivinícola.

Tal y como indicó Javier Gómez de la Denominación de Origen del Valle de Güimar, "somos los únicos que estamos apostando por un sistema de autoabastecimiento y una producción respetuosa con el medio ambiente, pero en la Viceconsejería de Agricultura del Gobierno de Canarias prefieren pasearse por Europa con todos los demás sectores menos con nosotros, mostrando un absoluto desprecio por la producción vitivinícola del Archipiélago".

DISCRIMINADOS.

Méndez Siverio explicó que desde 2001, la viticultura canaria está gravemente discriminada en el marco inicial del POSEICAN y ahora en el de las Regiones Ultraperiféricas (RUP), respecto al resto de las producciones isleñas protegidas y también en comparación con el sistema de coberturas aplicadas en Azores y Madeira, que reciben el doble de ayudas que Canarias.

En este sentido, los miembros de AVIBO exigieron la corrección de "este grave desequilibrio, aplicándose como mínimo un idéntico sistema de ayudas y coberturas que en Madeira y Azores".

El tesorero de Avibo, Jesús Corbo dijo que "el sector vitivinícola está en una situación extraordinariamente crítica y que no puede seguir esperando sin soluciones efectivas e inmediatas, constatando como día a día se desmoronan los esfuerzos de miles de familias y emprendedores en un mundo rural".

Para el presidente de la Comisión de Agroindustria de la Cámara y de AVIBO, Juan Jesús Méndez Siverio, el Gobierno de Canarias debe tomar medidas urgentes que mejoren las oportunidades de comercialización de los vinos canarios para que puedan competir en igualdad de condiciones.

Tal y como indicó, "exigimos que a corto plazo se grave con un 5 por ciento de AIEM al vino y mosto importando, que actualmente entra sin ningún tipo de imposición, y que, a medio o largo plazo este porcentaje se eleve al 15 por ciento". Añadió, además, "que lo normal es que un vino producido en una región cope el 30 por ciento del consumo en mercado local. Sin embargo, en el caso de los vinos canarios sólo llegan al 14 por ciento de la cuota de mercado".

A los problemas de comercialización del vino canario también se refirió Jesús Corvo. Explicó que el Archipiélago consume 60 millones de litros de vino, de los que sólo 4 son producidos en Canarias. Además, según indicó, "a pesar de que las malas cosechas han provocado una caída de la producción del 50 por ciento en 2006 y de hasta el 80 por ciento en 2007, en estos momentos, tenemos las bodegas llenas. A esto hay que sumar lo que nos vendrá de la vendimia de este año. Así no podemos seguir".

Por su parte, Juan Jesús Méndez Siverio y la asociación que representa, entienden que uno de los obstáculos para comercializar el vino canario es sus costes de producción. Según explicó, "las botellas, los corchos, las cajas de cartón y todo lo que necesitamos importar de fuera para poner el vino en el mercado tienen una gran carga fiscal a través del AIEM. Está repercutiendo de forma notable en el precio final de nuestros vinos, en un sistema de producción que ya de por sí es más caro por las dificultades de introducir sistemas de mecanización en las fincas".

Por otra parte, y según explicó Hugo Luengo, secretario de Avibo, los representantes del sector vitivinícola apuestan por la creación de una Indicación Geográfica 'Vinos de Calidad de Canarias' que permita recuperar y recualificar a vinos que, sin llegar a los requerimientos y exigencias de las denominaciones de origen (D.O.), deben salir del marco genérico y escasamente competitivo de los vinos de mesa.

Según Hugo Luengo, "el actual conglomerado de D.O. presentes en las islas debe dejar paso, con inmediatez, a un proceso dialogado, racional y eficiente de concentración en una única D.O. en cada Isla". A su juicio, el sector debe afrontar el reto de posicionar los caldos canarios en los mercados exteriores bajo un paraguas regional, ya que "esta es la única opción para tener presencia en mercados tan exigentes y competitivos como los de las bebidas alcohólicas y los vinos", apuntó

Los representantes de AVIBO han anunciado también su interés en disponer de un Instituto de la Viticultura y los Vinos de Canarias para que, en cooperación con los Centros de Investigación y Control de la Calidad Agroalimentaria puedan contar con una plataforma de investigación e innovación que se vaya desplegando, en términos realistas, en el amplio y complejo mundo de la viticultura canaria.